El presidente de la República, Iván Duque, le encargó, en septiembre del año pasado, al exgobernador de Norte de Santander, Luis Miguel Morelli Navia, la tarea de dirigir la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH). En el tiempo que lleva desempeñando su cargo ya muestra resultados.
En entrevista concedida a La Opinión, Morelli habla de las funciones que le competen y de las posibilidades para el departamento en el campo de los hidrocarburos.
¿Qué funciones cumple en la producción petrolera la Agencia Nacional de Hidrocarburos?
La ANH es la entidad del Gobierno encargada de administrar integralmente los activos de hidrocarburos de la Nación en todo su ciclo: desde la asignación y firma de contratos de exploración y producción (E&P), fiscalización de producción, liquidación y recaudo de regalías, hasta la culminación del contrato y su reversión al Estado con todas las garantías.
¿Cuál es la cobertura en el país?
La ANH es una agencia de alcance nacional, con cobertura en todo el territorio soberano, continental y marítimo de la República de Colombia.
¿Tiene convenios con entidades afines en el exterior?
La ANH actualmente no maneja convenios con entidades pares de otros países.
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¿Cómo están las posibilidades del país en cuanto al hallazgo de nuevos yacimientos petroleros?
La probabilidad de hallazgos de yacimientos petroleros está directamente relacionada con la cantidad de contratos de E&P que la ANH suscriba, y con los programas de exploración que desarrollen los inversionistas y Ecopetrol. En Colombia no se firmaban nuevos contratos exploratorios desde hace casi cinco años, situación que está revirtiendo la Agencia, razón por la cual las probabilidades de hallazgos de nuevos yacimientos petroleros en el corto plazo son moderadas.
¿Con respecto a Norte de Santander ¿qué proyecciones hay?
Aunque el entorno para el departamento ha sido complejo, desde el Gobierno Nacional y desde la Agencia Nacional de Hidrocarburos estamos planteando estrategias y acciones que ayuden a cambiar el panorama de Norte de Santander a mediano y largo plazo. En esencia, se trata de materializar las prospectivas hidrocarburíferas de la región, enfatizando su potencial minero-energético.
¿Qué tanto peso sigue teniendo hoy ese potencial minero-energético?
El potencial hidrocarburífero de la región es bueno, pero se requieren condiciones apropiadas para pensar en un mayor desarrollo. La cuenca del Catatumbo hoy en día cuenta con una producción fiscalizada de crudo de 2.409 barriles de petróleo por día (bpd), y una producción comercializada de gas de 3,78 millones de pies cúbicos por día (Mpcpd). Además, las reservas probadas (1P) para esta cuenca, en crudo, son del orden de 29,7 millones de barriles, y de gas del orden de 30,6 giga pies cúbicos, según el Informe de Recursos y Reservas, con corte a 31 de diciembre de 2017. Por otra parte, los recursos prospectivos de la cuenca Catatumbo son del orden de 3.700 mbpe, lo cual indica que existen unos recursos remanentes del orden de los 500 mbpe (OOIP), ubicándola como una de las cuencas importantes para el futuro exploratorio del país.
¿Sobre el desarrollo productivo de la región, ¿cuáles deben ser las prioridades?
Aunque en materia de hidrocarburos existen buenas perspectivas para el departamento, también se debe señalar que este sector ha sido fuertemente golpeado por los continuos atentados a la infraestructura petrolera, cometidos históricamente por grupos insurgentes. Lo cierto es que el sector de hidrocarburos en la región afronta retos en tres grandes frentes: condiciones económicas (bajo incentivo para producir con rentabilidad), situación de orden público (atentados terroristas recurrentes contra la infraestructura petrolera) y licenciamiento social (oposición sostenida por parte de la comunidad indígena Motilón Barí). Para la ANH, Norte de Santander es una región promisoria que mantiene el interés de inversionistas nacionales y extranjeros debido a sus potencialidades. Y aunque por el momento no existen condiciones para un desarrollo más profundo del sector de hidrocarburos, se están trabajando iniciativas junto con las autoridades regionales y locales para trazar una hoja de ruta que permita dinamizar este potencial.
¿Ve señales de fortalecimiento para Norte de Santander?
En materia de hidrocarburos, con el desarrollo en los últimos años de los campos de gas Oripaya 1 y 2, ubicados en jurisdicción de Cúcuta, se han ampliado las posibilidades de abastecer la demanda industrial de este producto, especialmente para la cadena productiva de vitro cerámica. El recurso existe, pero como la oferta supera la demanda, una mayor producción no resulta rentable. La ANH, junto con la dirigencia gremial regional, están liderando un proyecto para evaluar la factibilidad de desarrollar infraestructura de transporte desde estos campos productores a la red nacional de gasoductos, lo cual favorecería la comercialización de este recurso hacia el interior del país e incluso hacia la Costa.
¿Han pensado en un plan especial para el departamento?
Por una parte, se está adelantando un diálogo abierto y constructivo con la comunidad Motilón Barí para alcanzar acuerdos mínimos que permitan reactivar la producción de hidrocarburos en las operaciones aledañas a sus territorios. También, la Agencia está terminando de diseñar un proyecto piloto exploratorio, con inversiones cercanas a los 20.000 millones de pesos, para adelantar un programa de sísmica 3D en la zona del Catatumbo que permita evaluar y estimar con mayor exactitud la prospección. Otro aspecto es que, desde la ANH, hemos coordinado esfuerzos con la Unidad de Planeación Minero-Energética, para adelantar un análisis de la necesidad de interconectar al área metropolitana de Cúcuta con el Sistema Nacional de Transporte de Gas. Para ello, contrataremos un estudio integral que analice la oferta de gas en Norte de Santander, la demanda de gas en el área metropolitana de Cúcuta y un estudio de alternativas para el trazado de un gasoducto.
¿Cuáles serían los beneficios de un proyecto en ese sentido para la región?
Si este proyecto se convierte en una realidad, produciría un doble efecto: de un lado, un abastecimiento confiable del gas natural a nivel domiciliario, comercial e industrial; y del otro, la explotación de gas en nuevas áreas de Norte de Santander. Además, la ANH forma parte de la recién constituida Red de Aliados Estratégicos para la Estabilización e Implementación del PDET, de la cual el Catatumbo forma parte como una de las zonas priorizadas. Esta iniciativa está liderada por la Consejería Presidencial para la Estabilización y la Consolidación, y tiene como fin promover un espacio para la socialización y el seguimiento, así como la articulación de acciones público-privadas y de cooperación.
¿Tiene una opción real la Zona Económica Especial propuesta para Cúcuta?
Las zonas económicas especiales fueron concebidas para reactivar regiones que han mostrado declive en sus actividades productivas. El Gobierno ha propuesto la creación de una zona de este tipo para Cúcuta, pero su éxito o fracaso dependerá de la voluntad y coordinación que demuestren las autoridades y los empresarios para apropiarse de un proyecto que tiene que ser netamente regional para que prospere. Vale recordar que la proyectada zona franca, que estuvo vigente por más de cuatro años, en la práctica no se pudo desarrollar. Si no existe esa alineación, difícilmente se podrá consolidar algo significativo para la región.