El asesinato del propietario del almacén y taller de mecánica ‘Embragues Pacheco’, Elmer Pacheco Hernández, podría tener un rastro que conduciría hacia una banda criminal que viene extorsionando a los comerciantes del sector La Curva del Pescado, por la Avenida Las Américas.

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Y es que la víctima, hace dos meses, habría recibido una llamada donde le exigían una fuerte suma de dinero, a cambio de dejarlo trabajar en su establecimiento y no matarlo. Esto lo conocieron los investigadores judiciales que asumieron la investigación de este nuevo crimen que enluta a otra familia de Cúcuta.

Por eso, las autoridades judiciales están analizando los videos de las cámaras de seguridad de la calle 16 con avenida Las Américas, donde se dio el lamentable hecho, pues las imágenes serán claves para identificar al pistolero que llegó en una motocicleta Suzuki GN.

Elmer Pacheco era conocido en la zona porque comenzó como mecánico y poco a poco montó su propio negocio, hace unos cinco años.

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“Él era conocido porque era un ‘bacán’ con los demás mecánicos y no se negaba a nada, siempre apoyaba a la gente, por eso varias personas llegaron hasta el taller de mecánica para lamentar lo sucedido”, contó una familiar de Pacheco Hernández.

El crimen

Entre lágrimas y con la voz entrecortada, una familiar de Elmer Pacheco Hernández recordó que él, ayer, salió a las 8:00 a. m. de su casa con rumbo al taller a trabajar, como lo hacía todos los días.

“Esa era la rutina de Elmer de todos los días, a veces lo acompañaba su esposa, que gracias a Dios no llegó hoy (ayer) para atender, porque la hubieran asesinado también”, contó la mujer.

Cuando el reloj marcaba que eran las 9:20 de la mañana, un desconocido llegó hasta el establecimiento y se le acercó al comerciante, quien estaba detrás de una vitrina, luego de desenfundar una pistola, comenzó a dispararle.

A Pacheco Hernández le habrían propinado los disparos en el pecho, el cuello, el brazo y el antebrazo derecho.

El homicida una vez cumplió con su objetivo contra el comerciante, salió del negocio, se montó en la motocicleta y huyó.

“Yo estaba en el taller y escuché varios disparos, me alerté y salí para ver qué acababa de suceder, a lo que entré al negocio y vi al señor tirado en el piso ensangrentado. Un tío de él (Elmer) que trabaja al lado, se acercó al cuerpo y comenzó a llorar”, explicó un testigo del hecho.

Cuando la esposa de Elmer Pacheco recibió una llamada en la que le aseguraban que su marido acababa de ser asesinado, salió corriendo y llegó rápidamente al sitio y encontró la trágica escena.

Minutos después, varias patrullas de la Policía llegaron al sitio y de inmediato solicitaron la presencia de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) para que se encargara de la inspección técnica.

En el sitio se hallaron cinco vainillas de calibre 9 milímetros.

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