La innovación en el uso de energía renovable con paneles solares en la producción orgánica de peces de alta calidad conquistando el paladar de los consumidores, es el lema de la familia Vega Rincón en la vereda Santa Lucía del corregimiento de Aguas Claras, comprensión rural del municipio de Ocaña.
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A través de la Agencia de Cooperación Internacional alemana GYZ y el fondo Emprender, canalizan los recursos para la adecuación de los estanques con una membrana especial y aireadores para aumentar la producción por metro cuadrado, explicó la directora del proyecto, Eliana Vega.
El coordinador de la Oficina de Desarrollo Rural, zootecnista José Luis Amaya Pérez, resaltó el uso de la tecnología con energías limpias para producir pescado en poco espacio.
Vega contó que la idea nació hace año y medio en plena pandemia, bajo un sistema intensivo de la tecnología Biofloc.
“Producimos tilapia roja en estos momentos, abastecemos los supermercados de Ocaña, Teorama, González y Río de Oro, sur del Cesar. Gracias al fondo Emprender y al SENA vamos a ampliar la empresa con la implementación del sistema de invernaderos y la sala para el tratamiento de las vísceras”, agregó.
Dice además que se hacen siembras de 10 mil alevinos cada mes y medio y la cosecha recoge cada seis meses, para un promedio de cuatro a cinco toneladas.
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“Somos pioneros con este sistema con energías limpias, amigable con el medio ambiente, pues se maneja un estanque con una bio membrana, una aireación que mantiene los niveles de oxígeno disueltos en el agua, se fertiliza con materia orgánica, como melaza, harina de yuca, de trigo y purinas especializadas para los mismos peces”, acotó.
Solución sustentable en los sistemas acuícolas
La Asociación la integra 16 personas, en su mayoría víctimas del conflicto armado, quienes encontraron la posibilidad de mejorar las condiciones de vida a través de la piscicultura.
El asesor técnico, ingeniero ambiental Jesús Albeiro Amaya López, aseguró que con la misma agua a través de unos motores de oxigenación se puede producir más de 7 mil peces en un estanque de 6 metros de radio y uno de profundidad.
“Se reduce ostensiblemente el consumo de agua, es rentable y bastante apetecidos en los hogares de la región”, precisó.
GYZ aportó 55 millones de pesos para la instalación de los paneles solares.
“De cada piscina, adecuada con una membrana especial, se saca en promedio tres a cuatro toneladas de mojarra en 6 meses, las cuales son comercializadas en la región”, señaló.
Mediante el fondo Emprender se han canalizado 70 millones de pesos y se busca implementar invernaderos para mitigar la variabilidad climática y así mejorar la comercialización.
Con el SENA y el Tecnoparque, la comunidad recibe la asesoría necesaria para las buenas prácticas agropecuarias.
Asimismo, se trabaja en la adecuación de seis pocetas con todos los parámetros técnicos como modelo para ahorrar el agua, ya que los sistemas tradicionales no tienen en cuenta ese aspecto.
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“Trabajamos en un proceso de comercialización más estable para suscribir alianzas y conquistar mercados. También, la instalación de equipos de refrigeración”, puntualizó.
Una alternativa rural
El Biofloc se define como una agregación conglomerada de comunidades microbianas (flóculos) integrada por fitoplancton, bacterias y materia orgánica particulada viva y muerta, suspendida en el agua del estanque.
Es un mecanismo de aprovechamiento de los residuos, de la materia orgánica e inorgánica, siendo esta una forma rentable y amigable con el medio ambiente y con aquellos productores que lo emplean actualmente para el cultivo de peces, explicó el zootecnista, José Luis Amaya Pérez de la oficina de Desarrollo Rural de Ocaña.
El mercado se enfrenta a retos cada vez mayores dadas las condiciones ambientales actuales y la escasez de recursos hídricos que ha llevado a buscar opciones más asequibles para la economía y de bajo impacto ambiental.
También es una tecnología favorable con el ecosistema, que permite mejorar las condiciones ambientales actuales, dadas estas condiciones, el objetivo principal de la tecnología Biofloc es reemplazar los métodos de cultivos de peces convencionales, reduciendo el consumo de agua y su impacto negativo en el ecosistema, así como la reducción de los espacios de producción, promoviendo el buen uso del recurso hídrico en términos de preservación y conservación.
La tasa de recambio de agua en un sistema tradicional puede ser desde el 20% hasta un 300% por día y con la tecnología se puede reducir hasta casi un 0%.
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Por su parte, en un sistema tradicional de cultivo de peces, la producción puede ser de hasta 3 a 5 Kg por metro cúbico según la calidad y cantidad de agua, comparado con el nuevo que puede ser de hasta 40 Kg por metro cúbico, revolucionando e incrementando la cantidad de producción en muchas regiones del país, agrega el profesional.
Mejor producción
El sistema aumenta la producción acuícola y funciona de manera óptima para los sistemas de producción.
Desde el momento en que se depositan los peces en los tanques hasta el consumidor final, teniendo en cuenta una cantidad de tareas diarias como, por ejemplo, el aprovechamiento de la materia orgánica como proteína microbiana y así disminuir un poco los costos de producción por alimentación y obtener un producto de excelente calidad.
El funcionamiento óptimo debe contar con un sistema de aireación de la mejor calidad ya que de este depende todo el proceso pues dicha aireación mantiene los niveles de oxígeno en el rango ideal para garantizarle a los microorganismos y los peces la cantidad suficiente y que el sistema funcione adecuadamente.
El método tampoco acorta el tiempo de maduración del cultivo, pero sí produce mayor cantidad de peces en comparación con otros sistemas.
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Se debe tener en cuenta que es una tecnología de manejo técnico para el control de variables físico-químicas, ya que requiere de la medición de algunos parámetros de manera constante como el pH, nitratos, salinidad, alcalinidad, producción de flóculos, temperatura, entre otros, pues deben ser analizados y controlados según la especie cultivada.
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