Tres veces lo intentó y en la última lo consiguió. La Alcaldía de Cúcuta se convirtió en su objetivo y tras una reñida competencia, el pasado 29 de octubre, Jorge Enrique Acevedo Peñaloza por fin logró convertirse en el nuevo gobernante de la ciudad, con el apoyo de 89.753 cucuteños.

Sin asimilar todavía que después de tantos intentos fallidos lo había alcanzado, el sucesor de Jairo Tomás Yáñez Rodríguez empezó a trabajar y a prepararse para llegar listo al primero de enero, cuando encenderá motores su administración.

Sabe que cuatro años no son suficientes para sacar adelante todo lo que planeó y por eso perder tiempo no es una opción, mucho más ahora que la ciudad enfrenta enormes desafíos como la inseguridad, el crecimiento desbordado de los habitantes de calle, el deterioro de la malla vial, el desempleo y muchos más.

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En medio de una apretada agenda que incluye el proceso de empalme, capacitaciones, invitaciones, citas en los ministerios y las diferentes entidades del Gobierno, además de la conformación de su gabinete, del cual ya anticipó los primeros cuatro nombres (Juan Carlos Bocanegra, Planeación; Diego Villamizar, Seguridad; Miguel Armando Castellanos, Gobierno, y Patricia Ríos Cuéllar, Equidad de Género), el electo gobernante de los cucuteños habló con La Opinión sobre sus apuestas, prioridades y los temas neurálgicos que tendrá que asumir.

¿Qué es lo primero que hará por los cucuteños?

Ya empecé a hacerlo. Desde el 29 de octubre en la noche, después de dar gracias a Dios, invité a los presidentes de junta de acción comunal y ediles electos a una reunión de presupuestos participativos, al siguiente día, entendiendo que en Cúcuta hay que priorizar los presupuestos de acuerdo a las necesidades reales de las comunidades. Esa fue la primera acción y después iniciamos una serie de visitas a los ministerios, al Gobierno Nacional, tocando puertas con la cooperación, mirando los programas que hay actualmente y buscando la forma de conseguir nuevos apoyos para la ciudad.  La verdad es que hemos venido trabajando desde el primer día que nos eligieron y buscando llegar preparados cien por ciento al primero de enero.

¿Cuáles cree que son los tres temas más críticos de la ciudad que recibe?

La inseguridad, el habitante de calle y el desempleo, que es muy fuerte. La malla vial de la ciudad de Cúcuta también es un tema doloroso, pero la gente prefiere sentirse segura.

Seguridad

A propósito de la seguridad, usted ha dicho que esta Secretaría no la va a manejar un general, ni un coronel, sino un gerente, que será el alcalde, ¿en qué consiste esa estrategia?

Normalmente, la gente espera que el secretario de Seguridad sea un coronel, un general en retiro o una persona que tenga ese perfil, pero pienso que la Secretaría de Seguridad necesita una persona que entienda de seguridad y que tenga las cualidades de gerenciar, administrar y entender el tema.  Por eso, el que va a frentear la seguridad voy a ser directamente yo. Es decir, la responsabilidad de la seguridad de Cúcuta la voy a tener yo, y el que va a exigir indicadores soy yo. Eso lo tenemos claro.

¿Y cómo piensa enfrentar semejante desafío?

Por ejemplo, las alianzas con las empresas de seguridad privada es uno de los objetivos que tenemos para esta administración. Pensamos también en traer el Gaula a Cúcuta, con el fin de aumentar de 37 a 60 hombres. Además, en temas de seguridad no podemos pensar solo en Cúcuta, sino en un trabajo conjunto. Por eso, la idea es que ese trabajo sea entre Cúcuta, Los Patios, Villa del Rosario, pero también Ureña y San Antonio. Tenemos que establecer diálogos con el gobierno del Táchira, para ponernos de acuerdo en acciones que nos permitan generar una corresponsabilidad frente a este tema.

¿En qué consisten esas alianzas con las empresas de seguridad que propone?

Estamos adelantando conversaciones con los gremios y con empresarios, que son los más ávidos de seguridad en la ciudad y que quieren ayudar con todo lo que tiene que ver con este tema. La idea es generar un modelo de convenio que permita que, así como El Malecón tiene sus vigilantes de seguridad privada, el centro de Cúcuta también tenga la posibilidad, por iniciativa de los privados, de contar con sistemas de seguridad. El propósito es ponernos de acuerdo, aportar unos recursos por parte de la administración y hacer que empresas privadas apoyen el trabajo de la Policía.

La Policía hace un esfuerzo grande por brindar seguridad, pero no es suficiente. Cúcuta es una ciudad que tiene cuatro bandas internacionales como el Eln, las Farc, las Autodefensas Unidas de Colombia y Venezuela, el Tren de Aragua y 32 bandas criminales identificadas, entonces, no es fácil, pero sí necesitamos generar una sensación de inseguridad al delincuente, porque esa sensación no la debemos tener los cucuteños. Por eso, el propósito es hacer equipo y para eso los empresarios deben adquirir el compromiso de instalar cámaras de seguridad hacia las calles que faciliten el trabajo de la Fiscalía, el trabajo de inteligencia.

¿Y de qué forma se fortalecerá el trabajo de la Policía?

La comandante Sandra Mora armó el proyecto para subir de categoría la Policía Metropolitana y así poder aumentar el pie de fuerza y tener algunos beneficios. Adicionalmente, vamos a hacer el trabajo que haya que hacer con ella y que ya lo llevan adelantado, para traer a Cúcuta un C4 o un Centro de Monitoreo de Cámaras de Seguridad que permita hacerle frente a la delincuencia, pero entendiendo y nunca perdiendo el foco en que la principal forma de atacar la inseguridad es generando empleo.

Desde siempre, usted ha sido partidario de sacar el Ejército a las Calles, ¿lo va a llevar a la práctica en los próximos años?

En una reunión que sostuvimos con el coronel Guerra, del Ejército, acordamos que vamos a hacer la gestión y solicitarle públicamente al Gobierno la Policía Militar. Vamos también a generar unos incentivos alimentarios para las familias de los jóvenes que se quieran ir a prestar el servicio militar, de tal manera que el muchacho se vaya a ganar el sueldo que se ganan allá, pero sabiendo que su familia queda con una seguridad alimentaria. Ese plan de incentivos nos sirve a nosotros para fortalecer un cuerpo de Policía Militar que haga presencia en las calles.

Habitante de calle

Otro tema que usted encuentra prioritario y crítico es el del habitante de calle, ¿cuál es el plan en esos primeros 100 días de gobierno para hacerle frente al panorama que enfrenta la ciudad?

Durante todos estos días nos hemos dedicado a hacer el inventario de las fundaciones o los sitios donde podríamos llevar habitantes de calle.  No es fácil, pero hemos conseguido más o menos unos 180 espacios en la ciudad. Este es un tema de mucha experiencia, pues no todo el mundo crea una fundación para el tratamiento del habitante de calle o del consumo de sustancias psicoactivas. Entonces, lo primero es hacer ese inventario, que ya lo estamos haciendo, y luego empezamos a mirar en otras ciudades. La meta es que en el primer semestre tengamos 500 personas fuera de las calles de Cúcuta.

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¿Y cuál es el enfoque desde el que considera pertinente abordar este asunto?

Esto es salud mental, pero tiene que ver directamente con la seguridad de la ciudad.  Al sacar un habitante de calle de esa condición, estoy quitándole un cliente a las ollas. Si yo saco 500 o 1.000 habitantes de calle, le estoy quitando 1.000 clientes a las ollas y estamos ahorrando mucho dinero en seguridad, en salud y a los mismos cucuteños que son víctimas de permanentes robos. Paralelamente a esto, el delito de receptación también va a tener un enfoque especial, pues se debe atacar la compra y venta de cosas robadas. Por eso, el plan contempla que este delito se tiene que empezar a atacar un mes después de que saquemos al habitante de calle de las calles.

Empleo

Uno de los proyectos bandera de su campaña fue generar 35.000 empleos durante los próximos cuatro años, eso implica reducir 7 puntos porcentuales el desempleo actual, que está en 12%. ¿No cree que es una apuesta demasiado ambiciosa?

Sí, es ambicioso, pero precisamente de eso se trata, de ser ambicioso, de soñar de apostar.

Pero, ¿en realidad es viable?

En estos días que estoy en capacitaciones y en ejercicios de intercambio de conocimientos con otros alcaldes me senté a hablar, por ejemplo, con Alex Char, quien recibió una ciudad en Ley 550 y, ¿qué es Barranquilla cuatro años después de Alex Char? Entonces, la reducción de puntos porcentuales en el desempleo es viable de acuerdo a cómo se maneje la política de generación de empleo, a cómo se incentive la llegada de nuevas empresas y eso es algo sobre lo cual hemos venido trabajando. Entonces, creo que esta apuesta es totalmente alcanzable y a través de la colocación de recursos para la generación de microempresas y de famiempresas en la ciudad, con un acompañamiento, creo que se puede.

Plan de Desarrollo

¿Cuáles serán los pilares fundamentales del Plan de Desarrollo que guiará su administración?

La infraestructura vial de Cúcuta es una prioridad, así como la seguridad y la generación de empleo. También el tema de habitante de calle, el consumo de sustancias psicoactivas, el trabajar desde las instituciones educativas. Hacer un trabajo fuerte desde la Secretaría de Cultura, desde el Instituto Municipal de Recreación y Deporte. La verdad es que la cultura y el deporte deben enfocarse más en la protección de los jóvenes y en blindarlos del consumo de sustancias psicoactivas y como es una tarea fundamental, estará en los pilares importantes del Plan de Desarrollo.

¿Y cómo hará para financiarlo?

Mucha gestión. Yo siempre he pensado en las oficinas gestoras de proyectos especiales, entonces, creo que la Secretaría de Cultura debe tener una oficina de proyectos especiales, lo mismo que la de Planeación, la Secretaría de Educación. La zona rural igual, pues si hay algo para lo que hay recursos hoy en día es para el agro y para las zonas rurales. En ese sentido, considero que la forma de financiar el Plan es apoyarse en el Gobierno Nacional y hacer la gestión a través de grupos de profesionales que tengan la capacidad y la experiencia en gestión de proyectos.

A propósito del Gobierno Nacional, ¿confía en que haya un buen relacionamiento con el nivel central?

El lujo de estar en contra del Gobierno no nos lo podemos dar, porque si usted mira, el presupuesto de Medellín, de Cali, de Barranquilla, es diez, nueve u ocho veces más que el de Cúcuta, por lo tanto, ellos tienen cómo salir a pelear con el Gobierno, nosotros no. Nosotros tenemos un 83% de gente en pobreza, una ciudad que hoy tiene 220.000 migrantes, que tiene unas características especiales y yo no me puedo dar ese lujo. Además, hay que tomar decisiones importantes y las decisiones se toman concentrados en los problemas de la ciudad y buscando la mejor forma para atraer recursos.

¿Cómo enfocará su estrategia para integrar a la población migrante?

A mí me dan mucha tranquilidad las reuniones que hemos tenido durante estos días con los ministerios, porque la migración afecta el empleo, la educación, la salud, la seguridad. Hablemos, por ejemplo, de salud, porque basados en la migración hay recursos importantes tanto de la nación como de cooperación para esta atención. Para educación también hay recursos importantes. Lo que pasa es que hay que entender qué es lo que están buscando los migrantes para ellos y sus familias, que no es otra cosa que empleo, educación, salud, seguridad. Entonces, como eso es lo que ellos necesitan, eso es lo que necesitamos fortalecer y basados en la migración podemos estabilizar la situación.

Concesión de Aguas Kpital

¿Cuál cree que debe ser el futuro de Aguas Kpital, ahora que está próxima a terminarse esa concesión?

En ningún momento he dicho que el servicio de Aguas Kpital sea malo, lo que digo es que las utilidades de esa empresa deben ser para todos los cucuteños. Nosotros no tenemos por vocación operar servicios públicos, pero debemos obtener recursos y por eso la mitad más uno debe ser de los cucuteños. Entonces, necesariamente tenemos que cambiar el modelo. Dios me dio la oportunidad a mí de ser el alcalde en el periodo en el que se acaban dos concesiones.

¿Eso quiere decir que no van más las concesiones?

Operadores que permitan que Cúcuta participe en la mitad más uno de las utilidades. Yo no tengo problema con quién se haga, siempre y cuando se cumplan dos condiciones: primero que se haga bien, perfecto, y segundo, que Cúcuta sea socia, que las utilidades sean para los cucuteños,  si no, en 20 años vamos a estar en las mismas.

¿Y cuál es su posición frente al operador del Acueducto Metropolitano?

Cúcuta es dueña del 74% del Acueducto y lo lógico es que lo administre, pero el Acueducto Metropolitano es un tema a futuro. Hoy la EIS funciona, opera y responde hasta por 30 años más. Entonces, hay dos cosas claras: una, que el Acueducto Metropolitano es para contingencias y es a futuro; y dos, Cúcuta sí o sí tiene que apostarle, o al menos yo en esa administración le voy a apostar a iniciar los estudios y dejar listas muchas cosas para el proyecto Cínera.

Construir sobre lo construido

Desde que resultó elegido, usted ha insistido en que quiere construir sobre lo construido, ¿cuáles son esos proyectos o apuestas que mantendrá de su antecesor?

La Planta de Tratamiento de Aguas Residuales, replantear el estudio ya hecho de movilidad en la ciudad también es muy importante, el Tren del Catatumbo, por la importancia que tiene para el desarrollo de la región, y el gasoducto. Todas estas iniciativas de proyección para la región son claves y hay que continuarlas. Jairo Yáñez asumió un costo político al querer hacer unos proyectos visionarios que llevaron un tiempo en sus estudios y que él no pudo, políticamente, aprovecharlos, pero esos proyectos son importantes para la ciudad y hay que entender que se deben continuar.

¿Ese construir sobre lo construido incluye también mantener a algunos funcionarios de la administración Yáñez? ¿Cuáles?

En estos días me preguntaron que si iba a dejar gente de la administración de Jairo Yáñez y dije que hay gente muy buena y que hay más o menos unas cinco personas que pueden quedarse con nosotros, pero no secretarios de despacho, sino personas con todas las capacidades y cualidades que pueden aportar mucho.

¿Miguel Peñaranda puede ser uno de los que continúe?

Miguel Peñaranda, como muchos han dicho, no va a ser secretario de despacho. Esos son rumores. Pero, por ejemplo, si una persona como Miguel tiene el conocimiento de cuál es la raíz, de cuáles fueron los problemas de la ciudad, todo eso hay que aprovecharlo. El conocimiento es lo que más vale. Cúcuta no está para echar a perder nada, aquí nos toca es construir sobre la experiencia.

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¿Cómo define o califica la gestión de su antecesor?

Buenas intenciones.

¿Hay algo en particular del empalme que le preocupe?

El empalme nos suministra la radiografía de la ciudad, entonces todos los temas son muy importantes.

Pero, ¿hay algo que les haya generado una especial inquietud?

El Instituto Municipal de Recreación y Deporte necesita una reingeniería para enfocarlo directamente en las escuelas de formación deportiva, porque necesitamos blindar y proteger a los niños y jóvenes. El IMRD tiene unos temas de junta directiva y ahí hay un enquistamiento de algunos sectores en el deporte y yo no voy a permitir ningún enquistamiento y si me toca acabarlo y volverlo secretaría, pues lo vuelvo Secretaría, pero esa es una decisión que vamos a analizar. Vamos a tomar las mejores decisiones para el deporte. Quiero apostarle a que Motilones del Norte sea campeón de la liga de baloncesto, enfocarme en las escuelas de formación deportivas de baloncesto. El tema del Cúcuta Deportivo también habrá que tocarlo en su momento y buscar una solución real. 

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