Con el objetivo de sensibilizar a los motociclistas sobre las precauciones que deben tener en la vía y el uso de los elementos de protección para proteger su vida y la de los demás, la Cámara de la Industria de las Motocicletas de la Asociación Nacional de Industriales (Andi) y la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) acordaron crear un protocolo especial para la venta y entrega responsable de motocicletas nuevas.
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A través de la iniciativa ‘Movemos Colombia’, promovida por las ensambladoras de motocicletas que operan en el país, iniciarán la implementación de la estrategia para la venta y posventa de estos vehículos y que los nuevos compradores tengan en cuenta la importancia de adquirirlos de manera consciente, comprendiendo los riesgos asociados y tomando medidas efectivas para mitigarlos.
“Esta estrategia representa un paso adelante en la concientización de los compradores sobre la responsabilidad que conlleva adquirir una motocicleta. Trabajando junto a las autoridades, podremos crear un cambio significativo y promover una conducción más segura en nuestras vías”, dijo Iván García, director de la Cámara de la Industria de las Motocicletas de la ANDI.
Por su parte, Mariantonia Tabares Pulgarín, directora de la ANSV, manifestó que esta iniciativa representa una gran oportunidad de trabajo para disminuir los sinestros viales en el país, donde los usuarios de moto representan el mayor registro de fallecidos por accidentes en las carreteras.
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Asimismo, la funcionaria indicó que esta iniciativa se suma a la línea de acción de vehículos seguros, teniendo en cuenta que el año pasado, el Gobierno nacional expidió varias resoluciones que exigen a ensambladores, fabricantes y proveedores que comercializan carros y/o motos, cumplir con unos requisitos de desempeño de seguridad vehicular.
“En el caso de la industria de motos, con relación a sistemas de frenado incluyendo el equipamiento del sistema antibloqueo de frenos y combinado de frenos y llantas de motocicletas”, apuntó Tabares.
Según datos preliminares del Observatorio Nacional de Seguridad Vial, entre enero y septiembre de este año han fallecido 3.821 motociclistas en las vías del país, 288 más que en el 2022.
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Para el caso de Norte de Santander, mientras en el 2022, en el mismo periodo ya mencionado fallecieron 86 usuarios de moto, en este año ya han perdido la vida 121 motociclistas, lo que representa un aumento del 40,70% en comparación con el año pasado.
El nuevo protocolo
El protocolo incluye tres momentos, que van desde la asesoría comercial, la entrega de las motocicletas nuevas, hasta el seguimiento en posventa.
La primera etapa es la preventa, donde el asesor comercial tendrá que orientar a los interesados en comprar una moto en aspectos como: identificación de la motocicleta idónea, según las reales necesidades de uso y experiencia.
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De igual forma, sobre la tenencia y las cualidades de los componentes de seguridad vial en el vehículo, como frenos de disco y sistemas de frenado avanzado, entre los que se encuentran ABS o CBS, o el sistema de encendido automático de luces.
Además, los asesores deberán promover la participación de los interesados en programas de capacitación indicados por la ANSV.
La segunda etapa es la venta y entrega de la motocicleta. Allí, los compradores recibirán la guía de movilidad segura y sostenible construida por la ANDI en el marco de su programa ‘Movemos Colombia’.
Además, se les invitará a conformar la Red de motociclistas de la ANSV, para unirse a servicios y beneficios para el buen comportamiento vial.
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Luego, en la entrega de la moto, el asesor deberá revisar la tenencia del Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT).Además, sugerirá y verificará que quien retire la moto tenga licencia de conducción vigente y el casco para movilizarse.
Y finalmente, la posventa, que tiene como propósito que las marcas implementen procesos de seguimiento a las revisiones periódicas de las motocicletas, y envíen información sobre seguridad vial a sus compradores.
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