Ayer, la Fundación Empresarios por la Educación llegó hasta la ciudad de Cúcuta para desarrollar el conversatorio “Repensar la educación, rutas para transformar la calidad educativa”, con el objetivo de dialogar sobre los retos que tiene la región en esta materia y las alternativas que existen para superarlos.
El evento se llevó a cabo en las instalaciones de la Cámara de Comercio, destacando que como panelistas invitados estuvieron Andrea Escobar Vilá, directora ejecutiva de la Fundación Empresarios por la Educación; Luis Eduardo Royero, secretario de Educación de Cúcuta, Diomar Alonso Velásquez Bastos, secretario de Educación de Norte de Santander; Óscar Aldana, rector de la Institución Educativa Julio Pérez Ferrero; Francisco Unda, gerente de la Andi y Juan Diego Hernández, director del Doctorado en Ciencias de la Educación de la Universidad Simón Bolívar.
Andrea Escobar habló sobre los cambios que ha sufrido el sistema educativo, precisando que antes de la pandemia, el país estaba en un momento donde los niños y jóvenes solo llegaban a la escuela a adquirir unos aprendizajes, pero con la COVID-19 todo cambió.
“Los padres de familia estaban desconectados con lo que sucedía en la escuela, porque veníamos de un modelo tradicional donde todo era presencialidad, pero con la pandemia, la tecnología llegó para quedarse y nos encontramos con que debíamos flexibilizar los currículos, lograr que los niños aprendieran a través de WhatsApp, de correos y otras plataformas y los papás empezaron a descubrir qué hacía su hijo, cómo se comportaba en clases, qué lo distraía”, dijo Escobar.
La directiva señaló que, los docentes fueron pieza fundamental en este proceso, ya que aprendieron a comunicarse de una manera distinta no solo con los estudiantes, sino también con los acudientes y todo su sistema.
Frente a estos cambios y con el retorno a la presencialidad, Escobar detalló que uno de los mayores retos es lograr que lo aprendido en pandemia se mantenga, sobre todo en este momento “crítico” de la recuperación de los aprendizajes.
“Debemos evaluar en qué punto están los niños y jóvenes para poder ayudarlos y ayudar a los maestros, porque la pandemia dejó ver que en muchos grados quedaron vacíos y esto se va a ver reflejado cuando lleguen a once y tengan que hacer ese tránsito hacia la posmedia técnica, tecnológica o universitaria, más del 58% de nuestros jóvenes no están llegando a la educación superior”, agregó Escobar.