Dos meses duró Luis Bertulfo Carvajal, alias ‘Doce’, como comandante del Clan del Golfo en Norte de Santander. Este hombre es señalado de ser el cabecilla de esa estructura criminal, pero sin saberlo, desde su llegada en diciembre a Cúcuta, ya estaba en el radar de las autoridades judiciales.
Los investigadores de la Comisión Investigativa contra el Crimen Organizado (Cicor) de la Dirección de Investigación Criminal (Dijín) de la Policía, le siguieron sus pasos sigilosamente y lo detuvieron.
Los uniformados lograron llegar a este hombre por interceptaciones telefónicas e información aportada, descubriendo sus movimientos, por eso lo detuvieron cuando se movilizaba en una camioneta por San Cayetano.
“Estaba confiado. Como su rostro no era tan conocido, creyó que podría pasar desapercibido”, aseguró una fuente.
Alias ‘Doce’ habría llegado en diciembre por orden de ‘Chiquito Malo’ y ‘Otoniel’, a su arribo ordenó la distribución de un panfleto alusivo a las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (Agc) como también es denominado el Clan del Golfo, para así dar a conocer su presencia en el departamento y que pertenecía al frente Luis Orlando Padierna Peña.
De sus 47 años, este cabecilla habría dedicado 14 a pertenecer en las filas de este grupo armado en el que delinquía en Antioquia.
Según la investigación, ‘Doce’ habría ordenado la muerte de al menos cinco personas que fueron asesinadas entre enero y febrero, señaladas como colaboradores de la guerrilla del Eln.
Entre los homicidios que le responsabilizan a este hombre, son los de Edwin Alonso Vargas Ortega, alias Tuto, y Damaso Manuel Vásquez Amaris, ‘Guasón’ ocurridos la noche del martes 16 de febrero. Los cuerpos fueron hallados al otro día en la vereda Puerto León y en la vía que conduce a la vereda Cámbulos, del corregimiento Aguaclara.
Más del cabecilla
Según la investigación, Luis Carvajal habría llegado con 200 integrantes que le seguían en la parte armada y en la lucha para la confrontación con el Eln.
“Quieren llegar a los territorios que dan paso al corredor de movilidad del narcotráfico, que conecta con Venezuela, para así sacar droga a otros países y fortalecer su capacidad armada y financiera, por eso, todo se está dando a sangre y fuego de lado y lado”, dijo otra fuente.
A alias Doce las autoridades lo hacen responsable del cobro de extorsiones y un sin número de desplazamientos forzados en área rural de Cúcuta y Tibú, donde hoy reina el miedo y la incertidumbre entre la comunidad.
Les quitaron un arsenal de guerra
Tras la captura de alias Doce, las autoridades también ubicaron, por información de inteligencia, una caleta con arsenal de guerra, la madrugada del domingo.
Unidades de los comandos especiales de la Policía y del Ejército, que hacen parte de Esparta, llegaron a una vivienda ubicada en la vereda Puerto Villamizar, zona rural de Cúcuta, donde hallaron 29 fusiles, una ametralladora calibre 7.62 milímetros, 1.900 cartuchos calibre 5.56 milímetros, 103 proveedores para fusil y 9 para pistola, 2 radios base, cuatro radios scanner, 20 camisetas con las siglas AGC, cuatro chalecos arnés, bolsos, pañoletas y botas.
Según se conoció, El Clan del Golfo habría adquirido todo este material a través de alianzas con grupos narcotraficantes.
El general Fredy Alberto Tibaduiza Niño, comandante de la Región Cinco de Policía, aseguró que con esta captura se da un realce transcendental.
“Este es un golpe estratégico contra el Clan del Golfo que permite debilitar las intenciones de expansión hacia nuevos territorios”, señaló el alto mando policial.
El capturado tendrá que responder por concierto para delinquir con fines de extorsión, homicidio agravado, fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones, y fabricación, tráfico y porte de armas, municiones de uso restringido de las fuerzas armadas o explosivos.