Un niño de un año y cuatro meses de nacido falleció al caer a un recipiente lleno de agua cuando estaba jugando a las escondidas con sus padres en una vivienda del barrio Nueva Jerusalén, una zona de invasión del municipio de Bello.

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El menor, Antonio Vásquez Suárez, estaba en la vivienda junto con sus padres y al no encontrarlo, lo buscaron en la cocina donde lo hallaron en el balde en el que tenían agua recogida para afrontar uno de los recurrentes cortes del servicio que se presentan en el sector, señalaron los reportes policiales.

Al encontrarlo inconsciente, los padres tomaron un vehículo de un vecino y lo llevaron a la Unidad Intermedia del Doce de Octubre, donde llegó sin signos vitales.

El subcomandante de la Policía Metropolitana, coronel Rolfy Mauricio Jiménez, expresó que “al parecer se trató de un tema de descuido en la residencia por parte de los padres. Ellos pierden la atención y se percatan de la situación cuando está metido dentro del recipiente”.

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El oficial pidió a los padres de familia tener mayor atención con sus hijos para evitar esta clase de accidentes, así como evitar tener recipientes de este tipo sin tapa para que ellos no ingresen a los mismos.

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