El pasado miércoles, el humorista César Corredor, quien interpreta a la entrometida Barbarita, estuvo de visita en la ciudad como invitada especial de la Feria de Cúcuta.
En el show humorístico, Corredor interpretó a artistas musicales como Charlie Zaa, Galy Galiano, Pastor López, Dimedes Días, Jorge Celedón, Nelson Velázquez, Roberto Carlos, Leonardo Fabio y muchos más en una sola voz además de su show principal con Barbarita
“El recibimiento de la gente de Cúcuta siempre ha sido espectacular. Aquí tengo muchos amigos que siempre me reciben y cada vez que ellos se despobardan a acompañarme”, comentó Corredor muy contento.
Barbarita es uno de los íconos del humor más representativos de Colombia. “Ella en todo lado tiene sus chismosos y demás amigos. Es irreverente, cansona y metida, pero al mismo tiempo es una señora de una sociedad distinguida e intenta ser una señora muy pulcra”, comentó
En su visita, La Opinión habló con el humorista y nos contó secretos que Barbarita guarda a su público.
¿Hace cuánto nació Barbarita?
El personaje nació hace 17 años y salió de una mala imitación que yo hice de Gloria Valencia de Castaño. Digamos que hacer a Barbarita se me facilita porque mis rasgos no son tan fuertes debido a que no soy una persona barbada, entonces al afeitarme los rasgos de la cara se ven más finos y da como la apariencia de una señora de edad.
¿Y el nombre?
Quedó Barbarita por una vecina que yo tenía. Se le puso ese nombre entonces desde ahí quedó.
¿Cuánto demora con el maquillaje?
Entre 45 a 50 minutos aproximadamente demora el maquillaje. Luego como dicen “ponerse el baúl”. Son seis anillos, tres en cada mano; sus aretes, sus colgandejos, pulseras, collares, entre otras cosas.
¿En el armario cuántos vestidos tiene?
Hay dos vestidos; uno rojo que es el típico que utiliza para televisión. El otro es el de shows particulares y el de tierra caliente como la de acá. Es un vestido café que va pegado al cuerpo y una falda como las señoras antiguas que solo dejan ver del tobillo para abajo.
¿Y para eso existe algún color favorito?
El azul. Es un color que particularmente le gusta además del rojo. El segundo es el que la distingue y el azul porque es hincha de Millonarios a morir. La viejita sabe de fútbol, por eso trabaja en un blog deportivo y todos los días hace sus comentarios desacertados.
Hablemos sobre los tacones que ella usa
Es un tacón medio. No es ese puntudo alto porque no puedo. Uno de hombre no es capaz. Busqué ese zapato que usan las señoras de edad. Es un poco complicado porque yo soy número 41. Es raro ir a comprarlos porque me toca medírmelos y la gente se queda viendo (risas).
¿Qué tan complicado fue al principio?
Al principio es como el choque. Uno como que no domina las pestañas. Entendí porque las mujeres se demoran tanto con el maquillaje y el vestuario.
Luego de estar vestido como Barbarita, ¿qué se siente ser ella?
Cuando yo me maquillo como Barbarita generalmente no pasa nada. Una vez me coloco la peluca y los zapatos, adopto inmediatamente la posición de esa señora de 60 y pico de años con su bolso y su cartera. Empiezo a encoger el brazo, a caminar despacio y por supuesto a hablar como ella.
¿Existe algún pretendiente que Barbarita tenga por ahí?
Siempre le han intentado poner pretendientes en televisión pero aprendí de Carlos "El mocho" Sánchez, que uno nunca deben encaminarse por otro lado, ni ponerle pareja porque la gente sabe de todas maneras que detrás de la caracterización hay un hombre y eso desvirtúa mucho el personaje.
¿Entonces cuáles son los gustos de ella?
El fútbol. Ella ama mucho ese deporte y por supuesto a Millonarios. Critica todo lo que tenga que ver con el colombianismo; esa euforia por desbordar y demostrar cosas que a veces son tan irreales, pero que la gente a veces los trata de hacer ver buenas. No sin desmeritar nada.
En toda su carrera como humorista, ¿se ha sentido incómodo con este personaje?
Sí, dos veces me he sentido incómodo. En Cartagena un señor que es un gran comerciante, que tal vez nunca vio televisión, pretendió acosarme y yo creía que estaba molestando. Cuando me di cuenta todo era en serio. Vio a Barbarita y se enamoró de ella (risas). Luego yo me cambié y volví a sentarme donde estaba él pero como César, y el comerciante me mando a parar de ahí porque estaba esperando a una dama que había citado (risas). Se siente uno incómodo porque el señor intentaba agarrarme la mano, me brindaba cosas, me invitó a Cartagena a pasear por un yate con él.
¿Y la segunda vez?
Ahí fue un señor que estaba pasado de tragos en una fiesta privada y quería verme cambiar. Los hijos le decían “papá él es un hombre” y el señor negado en creerlo, les decía que me dejaran verme cambiar (risas). Hay momentos en los que uno se siente incómodo.
¿Cuáles son los gustos musicales?
Toda la música tropical. La música vieja, antigua, la Billo's Caracas Boys, Pachos Galán. De hecho en el show, ella dice que no le gusta el reguetón, nada de música electrónica y metálica porque para ella es su época antigua.
¿Esconde algún secreto ella?
No. Ella es una persona abierta. Es tajante y dice las cosas como son, a veces se pasa. Es directa e imprudente.
A parte de interpretarla, ¿Barbarita tiene algo más de usted?
La música. A ella la liga mucho la música tropical y a César Corredor también.
¿Hay Barbarita para rato?
Sí, afortunadamente este ha sido un personaje bastante agradecido porque yo no le he quemado. Últimamente salgo más seguido en Sábados Felices. Sin embargo, tengo pensado finalizar el personaje haciendo una película. Creo que voy poco a poco. Quiero hacer una película de humor bien hecha con ella.
¿Entonces qué verán los colombianos luego de ella?
Después de Barbarita pienso sacarle un poco más de partido a la otra faceta que la gente no conoce de mí debido a que en la televisión cobra muchos impuestos que claramente se deben pagar. Quiero darle un poco más de realce a el canto y la imitación como César.