Las redes de corrupción mezcladas con una mala administración de los recursos han hecho que la situación del Fondo Nacional de Prestaciones Sociales del Magisterio (Fomag) que ya venía mal, se haya hecho aún peor.
Lea también: Trágico choque en Bolivia de dos autobuses: 37 muertos y 30 heridos
En octubre de 2023, el Gobierno del presidente Gustavo Petro entregó a la Fiduprevisora, entonces bajo el mando de Mauricio Marín, la responsabilidad de implementar un nuevo modelo de salud para los docentes del magisterio.
Marín se fue de su cargo en mayo de 2024 y el gobierno Petro intentó hacer cambios al sistema, pero esto no ha impedido que se haya deteriorado aún más.
De acuerdo con un informe de Así Vamos en Salud, conocido esta semana, la situación del Fomag, que cobija a más de 800.000 docentes y sus familias, es bastante lamentable.
El documento del observatorio destaca que el Fomag cuenta con solo 3 Instituciones Prestadoras de Salud (IPS) por cada 10.000 afiliados, lo que es cobertura tremendamente baja que impide prestar servicios de salud de calidad. En distintas regiones del país, los docentes deben someterse a largos tiempos de espera y desplazamientos para lograr acceder a servicios médicos especializados.
Lea además: Alivio para compras con tarjetas de crédito: tasa de usura volvió a caer en marzo
Situación que es aún más preocupante si se tiene en cuenta que el magisterio presenta una estructura poblacional más envejecida que el promedio de los habitantes del país: un 42,3 % de docentes son mayores de 60 años, lo que implica mayor demanda de atención especializada en enfermedades crónicas. Esto exigiría al Fomag tener una capacidad financiera amplia para cubrir las necesidades de una población en su gran mayoría mayor y esto no ocurre.
Estas complicaciones han llevado a que las quejas (PQRS) se hayan disparado en un 266% desde 2017. Entre las principales quejas de los usuarios del sistema se encuentran: Negación o demoras en la asignación de citas y consultas, falta de entrega de tratamiento y tecnologías en salud, procedimiento administrativos engorrosos, entre otras.
Frente a la situación actual del sistema el director de Así Vamos en Salud, Augusto Galán Sarmiento, señaló que el sistema de salud del magisterio ya venía presentando problemas, y el cambio que realizó el gobierno de Petro en mayo del 2024 no realizó cambios de fondo que permitiera mejorar su servicio.
“El sistema de salud del magisterio no funcionaba bien y no venía funcionando bien. Este es un sistema público estatizado que no tiene gestión de riesgos financieros, que no tiene gestión de riesgos en salud y que no tiene gestión de riesgos operativos. Es un fondo pagador a los prestadores de servicios de salud a las clínicas y hospitales”, destacó Galán.
Entérese: La larga lista de los congresistas en el ojo de la corte por corrupción
“Realmente ahí no hubo un cambio de fondo, sino algo más relacionado con una argumentación y una idea de un modelo preventivo y predictivo, pero que la evidencia nos demuestra que no está dando ningún resultado y que la situación para usuarios y docentes del sistema lo que ha hecho es empeorar a lo que ya de por sí no venía funcionando bien”, añadió.