Desde comienzos del siglo pasado la celebración del día de la madre por petición de los comerciantes locales y con la complacencia de las autoridades de la época, se postergó al menos tres semanas en nuestra ciudad y el departamento, lo cual se hizo costumbre y ésta hizo que se convirtiera en ley. Hasta ahora a nadie se le ha ocurrido volver a mover la fecha para igualarnos al resto del país. Este domingo es el día de las madres, el último domingo de mayo. 

Los habitantes de otras regiones nos vieron siempre con algún grado de extrañeza por estar fuera de la fecha prevista para tan importante celebración. Pues bien, las circunstancias actuales dadas por la pandemia de la covid-19 y la agitación que se vive con paros y marchas, han determinado que la fecha sea postergada para hoy y todos al mismo tiempo estaremos haciendo el homenaje a nuestras progenitoras. Pero, justo esas mismas circunstancias que han propiciado el cambio no se han modificado de manera sustancial y aún prevalecen con la misma intensidad que tenían cuando se decidió la nueva fecha en el calendario de celebraciones. 

La pandemia sigue presente entre nosotros y según los últimos reportes continúan aumentando los casos y por tanto crece la ocupación de las camas disponibles para la atención de estos pacientes tanto en Cúcuta con Pamplona y Ocaña.

Entre tanto las marchas de protesta se suceden a diario y la tranquilidad que teníamos aquí se ha visto alterada porque se han producido desordenes y actos de vandalismo, el orden y la mesura están a punto de ser quebrantados de acuerdo con las informaciones que dan cuenta de las escaramuzas del viernes al atardecer en los alrededores de la redoma de San Mateo que terminó con la captura de un grupo de personas. 

Pero volvamos a lo esencial de este día. A pesar de las circunstancias dediquemos este domingo para hacer por sobre cualquier consideración un merecido homenaje a las mamás, las personas de mayor nobleza que son capaces de dar todo en favor de sus hijos, sin importar las condiciones en las cuales desempeñan ese papel vital. 

En un grupo especial están las madres cabeza de familia, ellas están identificadas y han sido estudiadas desde el ámbito universitario para descubrir sus capacidades que las hacen sobresalientes en el campo laboral, donde sin embargo no son apreciadas y remuneradas como debería ser. Se les han descrito las siguientes características: Piensan y actúa en función de las necesidades de su familia, lo que se traduce en orientación y atención al cliente, tienen liderazgo organizacional, muestran siempre integridad y lealtad, manifiestan competencia en el trabajo de equipo y aprenden y escuchar para lograr empatía gracias a su capacidad de comunicación. 

Hoy celebraremos en familia como en el resto del país, sin dejar de lado las recomendaciones dadas por las autoridades, sobre todo mantener en cuanto sea  posible el aislamiento y las medidas de protección, ya que tenerlas en cuenta será por el bien de las homenajeadas y toda la familia. Un abrazo y un especial saludo a todas las madres. 

jorgepabonl@yahoo.com