Se considera que en Colombia hay las suficientes leyes para proteger a los menores de edad. Así, por ejemplo, está la Ley 1098 por la cual se expide el código de la Infancia y la Adolescencia que establece normas sustantivas y procesales para la protección integral de los niños y adolescentes. En enero de este año entró en vigor la ley 1878, que modifica algunos de los artículos de la ley 1098, con el fin de reforzar las garantías de los menores en el ejercicio de sus derechos.Allí se resalta la importancia de la participación del Estado, la sociedad y la familia en el cuidado de los menores.
Sin embargo, todo parece indicar que pese a la existencia de estas leyes, desconocemos la importancia de los niños y la obligación de su protección, pues según los reportes del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar-ICBF y el Instituto de Medicina Legal-IML, cada día en promedio 7 niños son reportados como desaparecidos, cada día, 3 son abandonados y 23 son abusados sexualmente. El año pasado fueron asesinados 715 menores como resultado de la violencia intrafamiliar, el conflicto armado y la violencia urbana.
Con base en estudios realizados porla organización internacional no gubernamental, SaveTheChildren (Salvar a los niños),Colombia es el tercer país del mundo con más niños muertos por homicidio y el quinto país con mayor porcentaje de niños desplazados por el conflicto armado, cifras realmente alarmantes y preocupantes para las autoridades ante el crecimiento registrado. En esta triste realidad apenas somos superados por países como Siria, Sudan y Somalia.
Pero lo grave de esta situación es el ascenso de los abusos, pues según el ICBF, mientras en 2017 se abrieron 24.330 procesos por violencia contra menores, este año en el primer trimestre la cifra llegó a 5.870 casos. Para rematar, por lo menos por ahora, al comienzo de esta semana los periódicos mostraban la llegada a Hacarí de 400 niños desplazados en busca de ayuda, cifra que el jueves subió a 550.
¿Hasta cuándo en este país ser niño seguirá siendo un peligro por falta de una protección eficaz? Para empezar sería bueno aplicar los principios de los Países Bajos, encabezados por Bélgica, para tener los niños más felices del mundo: son la prioridad de la sociedad y de la política.
Nunca es tarde para empezar.