Las mediciones de opinión son un ejercicio muy viejo, tanto así que comenzaron a conocerse por allá en el año 1824 cuando un sondeo sobre la favorabilidad para la presidencia de los Estados Unidos realizado en Harrisburg, capital del estado de Pensilvania, dio como ganador a Andrew Jackson sobre John Adams. Este último a la postre fue el ganador de las elecciones por aquel entonces en el país del norte. Para mediados del siglo XX George Gallup introdujo conceptos científicos a estas mediciones y pudo predecir el triunfo de Franklin D. Roosevelt en 1.936.
Luego se popularizaron y son muy frecuentes en las etapas electorales para adelantarse a los resultados de las elecciones con muchos aciertos, pero algunas veces con fracasos en sus mediciones cuando surgen eventos nuevos muy cercanos a la fecha de elecciones. También son de uso común para medir la popularidad de los gobernantes a lo largo del periodo durante el cual ejercen como mandatarios y se advierten las tendencias de aceptación o rechazo a sus ejecutorias.
De estas últimas mediciones acaba de conocerse la que publica la encuestadora Invamer para Colombia. Lo primero que destaca es la continua caída en la popularidad del presidente Petro, pues el 66% de los encuestados está en desacuerdo con la gestión del presidente y solo el 26% la aprueba. Lo anterior significa un descenso en 6 puntos con relación a la anterior medición de 2 meses atrás. En la misma encuesta se preguntó sobre la situación del país, el 76% piensa que está empeorando y apenas el 15% está del lado de los que dicen que está mejorando. De tal forma que le va muy mal en apenas 16 meses de gestión al presidente Gustavo Petro.
Para Francia Márquez, la vicepresidente, los guarismos de esta medición tampoco le favorecen a ella que se eligió con los mismos votos del presidente como suele decir. Ella tiene el 56% de percepción negativa, mientras que su imagen positiva es del 24%
Los datos relativos a la corrupción siguen siendo altos, porque el 80% responde que está empeorando con el actual gobierno, apenas el 11% piensa lo contrario. La lucha contra la pobreza, la seguridad, la economía también tiene números muy altos de carácter negativo, alrededor del 80%
Se consultó también sobre la gestión de los mandatarios regionales. En Barranquilla el 60% de sus habitantes aprueba la gestión del alcalde Jaime Pumarejo. Claudia López, Daniel Quintero, Jorge Ospina, en sus respectivas ciudades tienen números negativos para calificar su gestión; lo mismo que Juan Carlos Cárdenas en Bucaramanga. Todos ellos habían empezado con cifras positivas. En las gobernaciones sacan buenas notas Elsa Noguera en Atlántico y Aníbal Gaviria en Antioquia.
Desde la presidencia no se advierten muchos cambios de rumbo para enderezar las políticas de gobierno, por el contrario, se insiste en la tendencia reformista y el plan de paz total que también tiene la desaprobación mayoritaria de los colombianos preguntados en la encuesta, porque el 67% cree que va por mal camino. Para las ciudades y departamentos queda la esperanza que los mandatarios que pronto se van a posesionar hagan un buen papel en las alcaldías y gobernaciones.
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