El escape de la señora Aida Merlano cuando cumplía una cita odontológica, fue una fantástica osadía y su actuación le puede asegurar un cupo en cualquier película de acción. Pudo saltar de un tercer piso sostenida de una cinta, caer y levantarse para seguir caminando, sin inmutarse y sin haber aceptado la ayuda que le ofrecieron los atónitos transeúntes que circulaban por aquel lugar de la singular escena que ha sido vista por miles de espectadores. Es probable que haya tenido algún tipo de entrenamiento, no de otra manera pudo salir ilesa esta intrépida escapista. Ese video le sirve, si es que aparece algún día, como carta de presentación para cualquier producción cinematográfica, sin que tenga que pasar las sesiones de casting.
Pero resulta más interesante que el mismo breve tráiler, saber quién o quiénes son los autores y los libretistas del guion. Porque se sabe que la protagonista de esta película es una señora vinculada a la política en Barranquilla, escaló desde las posiciones de abajo hasta convertirse en senadora de la república. En este último caso ya se sabe cómo lo logró, pagando votos, comprando conciencias, como muchos lo han hecho durante varios periodos, solo que ella dejó muchos cabos sueltos, los cuales fueron atados por las autoridades y se le pudo demostrar este delito electoral que la llevó a la cárcel para que pagara allí la condena. A esto puede añadirse que para acompañarla en su sitio de reclusión, faltan muchos de los políticos que han incurrido de manera reiterada en la misma conducta delictiva.
Que se sepa, la condena de 15 años por el delito cometido que, bien podía haberla reducido en poco tiempo con buena conducta en prisión, estudiando y haciendo uso de los beneficios que otorga el sistema penal. Lo que sí es seguro hasta ahora, es que con esa condena obtuvo su muerte política. Entonces, ¿por qué y para qué escaparse? ¿Está solo escabulléndose de las autoridades o habrá alguien más que está detrás de esta dama? Ahí existe un misterio también de película que no se logra ver en las borrosas imágenes que hasta ahora han sido publicadas. Tampoco se sabe bien quién es el director de la película y la importancia que tienen los actores de reparto y extras que cumplieron con este papel: odontólogos y auxiliares del consultorio, el motociclista que la recoge y quienes la ayudaron después a cumplir su propósito. La hija de la señora Merlano hizo parte de esta obra dramática y se puede intuir que actúa en beneficio de su madre.
Además ¿quién financió la operación? ¿Cuál fue el costo de la cinematográfica escapada? Esa como todas las películas tiene un valor y en este caso debe haber sido bien alto. Tampoco se sabe en detalle de dónde proceden los dineros que facilitaron la puesta en marcha y ejecución de la exitosa fuga, que se une a la lista de otras célebres que han desprestigiado a las autoridades carcelarias en nuestro país.
Lo mejor sería que apareciera o fuera encontrada la exsenadora para que explique muchas incógnitas que surgen alrededor de su actuación cuando cumplía una cita odontológica para un diseño de sonrisa, que todavía no hemos visto. Pero tranquilos, esta historia continúa, porque todavía faltan bastantes capítulos.