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Qué pasa con la ingeniería colombiana
No hay claridad y no se ha dicho la verdad, en describir el grave peligro sobre todos los habitantes del cañón del Bajo Cauca.
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Viernes, 8 de Junio de 2018

Gravísima la situación que está aconteciendo con Hidroituango

Aparte de los ingentes esfuerzos que se hacen para evitar una catástrofe ya anunciada, de proporciones incalculables, queda muy mal parada la ingeniería colombiana, en especial tratándose de obras estatales. 

La verdad sobre las fallas no se ha dado a conocer al país, los informes escuetos más que informar desinforman y las críticas llueven por montones desde la propia Sociedad Colombiana de Ingenieros y voces autorizadas en la materia. 

No hay claridad y no se ha dicho la verdad, en describir el grave peligro sobre todos los habitantes del cañón del Bajo Cauca, si llega a colapsar definitivamente esta obra colosal que hubiera sido de inmensa repercusión económica para el país. Al parecer muchas fallas humanas en este proceso de aceleramiento para la entrega de la obra, como el cierre de dos de los túneles de captación de las aguas del rio Cauca y el taponamiento del único que quedó en servicio, obligando a inundar la Sala de máquinas con un costo altísimo en aras de evitar una tragedia mayor. Lo cierto es que hay filtraciones de agua en el túnel, las compuertas no se han probado para abrir en un momento dado, generando una tragedia menor, la solidaridad y el empuje paisa ha salido a flote en estos momentos, con altos riesgos para su vida, pero no se dice la verdad y que puede llegar a generar alto número de muertos.

La presión del agua ha venido generando resquebrajamiento de la montaña, las filtraciones aumentan segundo a segundo, hasta el eventual momento en que se venga abajo la montaña arrastrando la presa y generando una tragedia de proporciones incalculables, tal como lo diagnostican expertos en estos temas y hay un silencio casi cómplice del Estado y la empresa constructora tampoco ha sido clara al respecto. 

Las fallas del Space en Medellín y otros edificios de una constructora privada marcan inmensos errores en la ingeniería, situación que se vive en otros sitios como Cartagena con el colapso de varios edificios en construcción y la orden de desocupar 12 edificios sin los debidos permisos y con eventuales fallas en diseño y construcción. 

La caída del puente Chirajara otra obra pública, con serias fallas en su estructura, llevan a pensar que existen fallas en estudio de suelos, cálculos de la obra, falta de interventoría, tal vez utilización de menos cantidad y calidad de los materiales requeridos, con lo que llevan a muchas familias a la ruina y acá en Cúcuta un edificio de 5 pisos y otra obra por el anillo vial occidental, demuestran que se están presentando sucesivos errores mucho más en zonas donde las tierras son expansivas de forma que requieren un tratamiento más profundo para su construcción. Acá se hizo una urbanización de VIS que también se festinó al sufrir grietas inmensas que obligaron a desocuparlas por el alto riesgo que ello conllevaba.       

Por ello, es importante que se hagan los ajustes necesarios para las autorizaciones a las construcciones, ya que esto parece llevar un elemento común como es la corrupción, situaciones que ameritan un estudio profundo y adoptar mecanismos que permitan llegar a la verdad de los hechos con la responsabilidad no solo patrimonial sino penal si fuere el caso.  

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