En el municipio de Chitagá, durante los últimos meses han implementado iniciativas para constituir escuelas de formación deportivas que beneficien a niños y jóvenes, fortaleciendo sus capacidades y abriendo espacios para promover la actividad física.

La idea de crear una escuela de formación deportiva rondó por la cabeza de tres jóvenes chitaguenses al ver algunas falencias que tenían en el municipio en relación con este tema. 

Motivo que los impulsó a trabajar para abrir espacios a los pequeños que anhelaban poder participar en campeonatos y ser apoyados en el deporte.

A través de estos escenarios, Walter Carrillo, Juan Carlos Moreno y Diego Andrés Fernández Vera, decidieron abrir las escuelas y llevar un mensaje de sentido de pertenencia a la comunidad para hacer trabajos colectivos y velar por el futuro de los menores.

Le puede interesar: ¿Ciclovías en el centro de Cúcuta? Lea de qué se trata

También, aportan a la formación ética de los alumnos, el aprovechamiento del tiempo libre y la representación de su municipio en diferentes competencias deportivas, lo que resulta satisfactorio para las familias de los deportistas frente a los diferentes peligros a los que hoy en día están expuestos sus hijos.

Como fruto de esfuerzo y dedicación, las escuelas de formación deportivas llamadas Edgar Castellanos y Valle de los Arrayanes, lograron gestionar gracias al apoyo de Jeisson Miguel Vera, líder del municipio, implementos para llevar a cabo los entrenamientos.

Las ayudas están compuestas por: Balones, petos, platillos, escalera de coordinación, conos, bastones, hexagonales y paracaídas de resistencia.

Gracias a esto se fortalecerán las escuelas brindando elementos básicos para su funcionamiento.

Para Jeisson Vera, esta gestión va a dar un impulso a las escuelas con insumos importantes que permitan a los niños y jóvenes tener una buena práctica. También dijo que conoce los dos proyectos y sabe que iniciaron desde abajo y con esfuerzo se han mantenido.

“En los últimos meses, se han tenido muchachos con buenas destrezas para el fútbol y microfútbol, por eso vemos con gran importancia obtener este tipo de aportes, porque permite que esas cualidades se puedan ir puliendo en el camino”, manifestó.

Por su parte, Diego, profesor de la Escuela Edgar Castellanos, contó que la iniciativa de abrir una escuela inició hace tres años como respuesta a la necesidad de la comunidad del barrio La Alejandra del municipio, al no tener ninguna oportunidad para hacer actividades deportivas.

Lea aquí: Parques de Cúcuta, atormentados por la inseguridad

Según él, los niños son los más interesados y aunque no es licenciado en educación y deportes, tiene amplia experiencia en el tema, pues, ha estado involucrado en este mundo casi toda su vida.

“Es un trabajo agradable, no tenía preparación como docente en la parte deportiva, pero sí tenía ganas de trabajar y enseñarles toda mi experiencia”, aseguró el joven de 25 años.

El camino de las escuelas no ha sido fácil, en medio de la pandemia tuvieron que recurrir a diferentes alternativas para sostenerse y seguir trabajando.

Hasta el momento no han recibido ningún apoyo por parte de las entidades de su municipio.

Lo anterior no ha sido ningún obstáculo para ellos, por ejemplo, la escuela Edgar Castellanos ha sacado rifas, ventas de tamales y rellenas gracias a la colaboración de los padres de familia para poder llevar a sus alumnos a campeonatos en otros municipios.

Su nombre se dio en honor al profesor Edgar, la popular pulga de Chitagá quien falleció en el transcurso del proyecto.

Lea además: Denuncian cobros de matrículas en colegios públicos de Cúcuta

Para el otro año, estas iniciativas tienen como propósito incentivar el deporte no sólo en el sector urbano sino en la zona rural del municipio, donde más personas entiendan la importancia del deporte en la vida de los menores, aprovechando sus tiempos libres y fomentando la cultura.

Talentos locales

Gracias a las escuelas los niños, niñas y jóvenes encuentran en el deporte el escape perfecto para salir de la rutina y sumergirse en un mundo diferente y divertido creando una conexión con el fútbol donde sólo ellos la viven, sienten y disfrutan.

En cada entrenamiento cuentan con la oportunidad de aprender cosas nuevas y descubrir habilidades para la vida, allí radica el trabajo que vienen haciendo las escuelas deportivas de Chitagá.

Carlos Andrés Cristancho, quien hace parte de Valle de Los Arrayanes, comentó que tenían la fortuna de contar con buenos profesores, algo que para ellos es fundamental al momento de desarrollar sus competencias.

Frente a las herramientas que recibieron aseguró, “los nuevos implementos nos van a ayudar mucho porque no contábamos con ninguno de ellos”.

De parte de las escuelas, la invitación es a todos los chitaguenses para que aprovechen los servicios que prestan y empiecen a motivar a sus hijos.

También ver estos espacios como aportes al crecimiento de su municipio, convirtiéndose en proyectos que los impulse a destacarse a nivel nacional.

Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en: http://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion