Diariamente alrededor de 20 jóvenes asisten a los entrenamientos dirigidos por Juan Muñoz, exclavadista y excampeón nacional, quien desde el inicio de esta disciplina supo ver el potencial que tenían la juventud cucuteña, resaltando el papel de la mujer en el deporte.

Fue este interés el que le permitió a figuras como Daniela Obando, Angie Rincón, Keisha Álvarez y Soraya Murgas, mostrarse como firmes candidatas a los títulos en las diferentes competencias y torneos en los que la selección norte de clavados se hace presente. 

Este deporte, que califica la técnica, el salto y la tenacidad de quienes se arriesgan a lanzarse desde las plataformas de tres, cinco, siete y diez metros de altura, ha sido el máximo exponente de la gallardía de la mujer nortesantandereana, pues a pesar de las críticas, estas deportistas siguen luchando por traer buenos resultados para el departamento. 

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“La decisión está en uno mismo, yo practiqué varios deportes y me decidí por clavados que no es fácil el riesgo y las críticas siempre estarán presentes pero no nos distrae de nuestro objetivo” dice Angie Rincón, clavadista de 20 años quien práctica esta disciplina hace dos. 

Para ella, el apoyo de su familia ha sido fundamental para su desarrollo deportivo, pues le ha ayudado a superar las críticas de la gente que ve con poco interés y desconocimiento este deporte, donde el número de mujeres interesadas en este va en aumento con el pasar de los meses. 

“Cuando tuve un pequeño accidente en la plataforma y me quemé mucha gente me dijo que era muy riesgoso y que no debía seguir, pero es lo que me gusta y lo que me apasiona” comenta Keisha Álvarez, quien tiene 13 años y una gran proyección en la disciplina. 

Como Keisha existen varias deportistas que se destacan en cada una de las competencias a las que asiste la selección norte de clavados, mujeres que gracias a su talento y constancia dejan en alto el nombre de la región y sueñan con hacer parte de la selección Colombia de clavados, sueño que hasta ahora solo Daniela Obando ha hecho realidad.

Juegos nacionales, departamentales, mundiales y hasta Juegos Olímpicos están en la mira de estas deportistas y de su entrenador, quienes representan la perseverancia y el trabajo duro de una ciudad que sueña con catalogarse como una de las grandes potencias de clavados del país.