El alcalde de Cúcuta, Jorge Acevedo anunció, ayer, que la ciudad ya superó los 16.000 desplazados que han llegado desde la zona del Catatumbo, por lo que se encuentran en etapa de alistamiento en caso de que sea necesario habilitar albergues.

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El mandatario indicó que, aunque está disminuyendo el número de víctimas que viene arribando a la capital nortesantandereana, la capacidad hotelera rebasó, puesto que son más de 2.800 las personas ubicadas no solo de Cúcuta, sino también en Villa del Rosario, Los Patios y El Zulia. 

Por esa razón, informó que resolvieron destinar como posibles albergues los Centros de Integración Ciudadana (CIC) ubicados en Trigal del Norte, Torcoroma III, Prados del Este, El bosque y Metrópolis. 

“Estamos listos, con colchonetas y carpas, pero nuestra prioridad es evitar llegar a ese punto, ya que implica mayores complicaciones logísticas y económicas”, indicó Acevedo.

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Sin embargo, señaló que, de tener que llegar hasta ese punto, el primer CIC en habilitarse sería el de Prados del Este o el de García Herreros, lugares que ya se están acondicionando y que tendrían la capacidad para atender a varios núcleos familiares 

El alcalde también destacó que, a pesar del alto volumen de personas atendidas, se ha logrado evitar que los desplazados duerman en las calles o parques de la ciudad.

Jorge Acevedo comparó esta situación con la experiencia vivida durante la ola migratoria venezolana de hace unos años y en ese sentido dijo que la administración cuenta con conocimientos previos para gestionar crisis humanitarias de esta magnitud.

El alcalde recordó que, durante el 2018, en el área metropolitana de Cúcuta se instalaron más de 10 albergues temporales, los cuales fueron implementados con el apoyo de organizaciones humanitarias, la Alcaldía, la Gobernación y agencias internacionales. 

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Así las cosas, en caso de implementarse los albergues, allí se ofrecerán servicios básicos como alimentación, alojamiento, atención médica, y orientación jurídica para los desplazados en situación de vulnerabilidad.

La Registraduría Nacional del Estado Civil también se encuentra ya atendiendo a las personas del Catatumbo que han llegado sin documentos, procesos que son gratuitos en los municipios receptores de las víctimas del conflicto. 

“Gracias a la organización, a todos se les ha brindado alguna solución. Algunos han recibido kits de emergencia con colchonetas y alimentos, otros han sido alojados temporalmente en hoteles, mientras que muchos más se han trasladado con familiares o amigos, pero la ayuda ha sido constante, apoyada por operadores, empresarios locales, donaciones ciudadanas y cooperación internacional.”, agregó el alcalde. 

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Acevedo mencionó que ciudades como Bogotá, Medellín y Bucaramanga han enviado ayudas humanitarias a través de organizaciones como la Corporación Presentes, que hasta ayer había recaudado $132’000.000 destinados a la compra de mercados, carpas y otros elementos necesarios, pues la administración ha optado por recibir las donaciones en especie para garantizar un manejo transparente de los recursos.

Otras ayudas

La Gobernación de Norte de Santander también ha liderado la entrega de ayudas humanitarias, no solo para Cúcuta, sino también para Ocaña y Tibú. 

Hasta el lunes, 35,5 toneladas habían sido distribuidas en esos dos municipios, y cerca de 18 más fueron entregadas a la Alcaldía de Cúcuta. 

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“Estas primeras entregas son de productos adquiridos por la Gobernación y otros donados por empresarios y ciudadanía en general que han acudido a las instalaciones de la Gobernación”, explicó el gobernador William Villamizar Laguado. 

Entre los elementos distribuidos figuran alimentos como arroz, frijol, harina, arveja, caraota, aceite y pastas; productos de aseo; menaje para preparación de alimentos; kits de aseo; colchonetas; pañales; toallas higiénicas; agua y donaciones de zapatos y ropa. 

Piden dar condición de refugiados a desplazados

El Centro de Derechos Humanos de la Universidad Católica Andrés Bello (CDH-Ucab) ha advertido que las personas que huyeron de la región del Catatumbo hacia Venezuela, debido a los fuertes enfrentamientos armados entre grupos irregulares, no deben ser considerados por las autoridades venezolanas como desplazados, sino como refugiados.

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“Quienes llegan a Venezuela huyendo del conflicto armado en Colombia son refugiados que requieren protección internacional, pues sus circunstancias de huida encuadran en lo previsto en la Convención sobre el Estatuto de Refugiados de 1951 y la Declaración de Cartagena de 1984″, señalaron en un comunicado. 

El CDH-Ucab planteó que desde la expulsión masiva de personas de nacionalidad colombiana por parte del gobierno de Venezuela, en agosto de 2015, se había reducido drásticamente el flujo de migrantes desde Colombia hacia Venezuela y, de manera simultánea, comenzó la salida de personas venezolanas a través de la frontera común.

“Desde entonces, no se veía un fenómeno de huida de personas colombianas a Venezuela, como se comenzó a observar a partir del 16 de enero de 2025. Debido a esta situación”, añadieron. 

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Se estima que unas mil personas colombianas habían llegado a Venezuela hasta el 20 de enero, principalmente al estado Zulia, procedentes del Catatumbo.

“En tal sentido, el Estado debe brindar a estas personas protección, garantías de no devolución, acceso a derechos, resguardo frente a posibles ataques de grupos irregulares y salvaguarda ante retornos no voluntarios. En estas circunstancias, la hospitalidad es un deber. Rechazamos los comentarios xenófobos y revanchistas que pretenden comparar con expresiones negativas las tragedias migratorias de Venezuela y Colombia”, mencionaron. 

En noviembre de 2024, el CDH-Ucab realizó una visita de trabajo a la ciudad de Cúcuta, donde constataron el temor de las personas sobre la reaparición de un inminente conflicto armado entre grupos irregulares, como la guerrilla del Eln y disidencias de las Farc, una advertencia que se cumplió. 

*Con información de Efecto Cocuyo*

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