Un balance de tranquilidad entregaron las autoridades locales y departamentales tras la jornada de protesta que se cumplió ayer en Cúcuta y otras localidades, dentro de la convocatoria hecha por el Comité Nacional de Paro.
Las marchas en esta capital que contaron con la participación de campesinos llegados del Catatumbo, se desarrollaron de forma pacífica, haciendo gala de mucho orden por parte de las diferentes organizaciones, con música, danza y otras expresiones artísticas, con las que contagiaron de alegría a los ciudadanos que salieron a las calles a respaldar las movilizaciones.
El Gobernador de Norte de Santander, Silvano Serrano, desde el Puesto de Mando Unificado, dijo que junto al alcalde de Cúcuta, Jairo Yáñez, los alcaldes del área metropolitana y las autoridades que hacen parte de esta instancia, se hizo seguimiento y monitoreo permanente al desarrollo de las manifestaciones, tanto en la capital del departamento como en los demás municipios.
Serrano informó que como se había acordado, se garantizó el derecho a la protesta social y a la movilización, que transcurrió de manera pacífica, rescatando una vez más ese activo que tiene la región. “El desarrollo de estas actividades se cumplieron en completa normalidad, con la garantía de derechos y el acompañamiento de la Defensoría del Pueblo, la Procuraduría, las personerías y organizaciones de defensa de los Derechos Humanos”.
Resaltó el comportamiento de las personas que marcharon y reconoció “el ejercicio de la Fuerza Pública a quienes acompañamos en esta tarea de ser garantes de los derechos y las libertades ciudadanas”.
El gobernador informó que recibieron el pliego de peticiones unificado, “que permitirá comenzar desde ya un ejercicio de concertación y diálogo, que permitirá el día de mañana (viernes) instalar una mesa para trabajar en la construcción de una metodología que posibilite, con presencia del consejero Emilio Archila, arrancar el proceso de negociación y de diálogo”.
El alcalde de Cúcuta, Jairo Yáñez, hizo por su parte un reconocimiento a todas las organizaciones sociales y campesinos que participaron de la jornada, “que han entendido que la única herramienta para salir adelante en estas complejas situaciones, es justamente la del diálogo constructivo y respetuoso. El compromiso general de la ciudad será el de articular una mesa permanente, que he propuesto como apoyo natural a estas peticiones. Que no hayan silencios y que en corto tiempo nuestras comunidades reciban este mensaje de construcción colectiva de una región y de una ciudad más competitiva”.
La Alcaldía de Cúcuta, con 40 gestores de convivencia de las secretarías de Gobierno, Posconflicto y Paz, Equidad de Género y Desarrollo Social, acompañaron las diferentes marchas en la ciudad, para garantizar el derecho a la protesta y la protección de los derechos humanos.
Movilizaciones en los municipios
“Unos 4.300 campesinos nos desplazamos en caravana desde Sardinata hasta El Zulia, donde se marchó por las principales calles y tras un acto político y cultural en el parque principal, llegamos al sector Urimaco (Cúcuta), donde permaneceremos hasta que avancen las negociaciones del paro nacional”, según el dirigente Olger Pérez.
Explicó que no participaron en las marchas que tuvieron lugar en Cúcuta, por estar en desacuerdo con los acercamientos de un sector que hace parte del Comité Departamental de Paro con autoridades del orden departamental y municipal, desconociendo la representación de toda una región.
Pérez dijo que respaldan el pliego construido con todos los sectores que hacen parte del Comité Departamental de Paro, en el que están representados los obreros, sindicatos, asociaciones campesinas, víctimas, educadores, cuya elaboración inició hace 15 días, además de las directrices que trace el Comité Nacional del Paro para los próximos días.
En diferentes localidades del Catatumbo la movilización popular también se hizo sentir, donde la población pidió fin a la violencia, al abandono estatal, la represión oficial y la falta de políticas agropecuarias.
Unos 5.000 labriegos arribaron con pancartas y banderas al corregimiento de San Pablo (Teorama), para exigir al Gobierno Nacional un tratamiento diferencial para restituir el tejido social y lograr la convivencia pacífica en una región con tantas riquezas.
En Pamplona delegaciones de los municipios de esta provincia se movilizaron en una caravana y posterior marcha de docentes, sindicalista y otras organizaciones en apoyo al paro contra el Gobierno Nacional.
Guardando las medidas de bioseguridad y distanciamiento social, los manifestantes recorrieron las principales vías del Centro Histórico de la ‘Ciudad Mitrada’. En horas de la tarde el turno fue para los estudiantes universitarios que con actos simbólicos se mantienen en pie de lucha para reclamar mejores políticas educativas y otras acciones que favorezcan al pueblo colombiano.
Maestros
Juan Carlos Peña, presidente de la Asociación Sindical de Institutores de Norte de Santander (Asinort), dijo que las marchas de ayer dejaron un balance positivo por la respuesta que dio la ciudadanía al llamado a la protesta social, donde el magisterio de Cúcuta, el área metropolitana y otras localidades participaron activamente, al igual que lo hicieron en Ocaña y Pamplona, junto a la Central Unitaria de los Trabajadores (CUT), el sector salud y los trabajadores del Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena), entre otras organizaciones.
En Cúcuta la llegada de unos 3.000 campesinos que se unieron a las diferentes asociaciones que marcharon en apoyo al paro nacional, causaron traumatismo en el flujo de vehículos de pasajeros y particular, tanto en Atalaya como en la zona céntrica de la ciudad.
En algunos momentos de las manifestaciones el centro comercial Ventura Plaza, la Terminal de Transportes y el parque La Victoria fueron espacios custodiados por la fuerza policial que acompañó las marchas, lo que generó enormes atascos, lo que hizo que decenas de conductores buscaran vías alternas para llegar a sus diferentes destinos. Sin embargo, el servicio público de pasajeros, individual y colectivo, fue prestado en toda la ciudad