La administración de Donamaris Ramírez le hizo mejoras sustanciales a la malla vial de Cúcuta, deteriorada en casi toda su extensión al inicio de su administración, pero el impacto al finalizar su mandato solo habrá representado el diez por ciento en  los 1.200 kilómetros de vías que tiene la capital nortesantandereana.

De acuerdo con los cálculos presentados por el secretario de Infraestructura, Juan Carlos Sierra, la meta de la actual administración al corte del 31 de diciembre de 2015 es la de dejar pavimentados 120 kilómetros de vías en mal estado.

Esto le presentará al municipio una inversión que se aproxima a los 118 mil millones de pesos, lo que en cien años hubiera invertido en la misma misión la anterior administración de María Eugenia Riascos Rodríguez, con apenas mil millones de pesos en su cuatrienio.

Sierra explicó que la prioridad de la inversión se enfocó en mejorar los tramos viales en peor estado, incluyendo los del centro de la capital nortesantandereana y los corredores por donde se desplaza el transporte público colectivo.

“Se puede decir que la movilidad se mejoró y que gran parte de la malla vial del valle de Cúcuta cambió del cielo a la tierra en esta administración, dado que lo que heredamos fue una ciudad destrozada en todas sus calles”, dijo el alcalde Ramírez.

No obstante esto, la realidad del estado de la malla vial de Cúcuta sigue siendo de pronóstico reservado, “pues a pesar de las importantes mejoras que ha recibido en esta administración, aún mil kilómetros de vías en mal estado esperan inversión, en especial las calles de los barrios en las ciudadelas de Juan Atalaya, La Libertad y Belén”, dijo el ingeniero de vías y transporte Jorge Villamizar Rosas.

El experto reveló que en materia de costos recuperar la totalidad de la malla vial cuesta 1 billón de pesos, casi dos presupuestos de Cúcuta juntos.

Un gremio que reconoce el avance que se imprimió en la administración de Ramírez en materia de recuperación de las vías fue el del transporte.

“Antes de asumir la alcaldía Donamaris las calles estaban convertidas en trochas, hoy podemos decir que eso pasó a la historia, al menos por donde debemos movilizarnos en la ciudad”, dijo Juan Castro, asesor de Transporte en varias empresas nortesantandereanas.

El inicio de la recuperación

El conductor de bus urbano Juan Elías Gómez confiesa que hasta 2011 cumplir con un recorrido desde la Ciudadela de Juan Atalaya hasta la Ciudadela La Libertad, no solo le hacía salir canas esquivando huecos de un lado a otro o saltando zanjas para que su buseta no quedara encallada en el barro, sino que además le reportaba multas por superar la hora y 20 minutos que le imponían como límite.

O se comía uno los huecos para llegar en el tope del tiempo exigido, sin importar los sacudones que tuvieran que soportar los pasajeros,  o simplemente les sacaba el quite y se relajaba para proteger el carro, señaló Gómez.

Confiesa que por lo general a los conductores de bus urbano, o mejor a las busetas, les tocaba devorar las vías cubiertas de huecos para evitar las sanciones, hecho que también les reportaba pérdidas por los daños sufridos en los sistemas de rodamiento de sus carros.

“Obvio que había un malestar generalizado en los ciudadanos y ello demandaba resultados inmediatos para frenar las protestas, por eso el primer reto de nuestra administración fue la malla vial”, dijo Ramírez.

El termómetro para bajar la temperatura del inconformismo fueron las obras de reparcheo y bacheo vial que se emprendieron al cumplirse el primer semestre de 2012 y que terminando 2013 alcanzaron de manera significativa un cambio a la vista del mal estado que presentaban las calles.

Los primeros tramos que se abordaron fueron los del centro de la ciudad, “dado que a la vista de los visitantes daba pena que una capital de departamento tan importante tuviera sus calles hechas un desastre”, dijo Ramírez.

En esta fase también se intervinieron las vías empleadas por el transporte público y las principales avenidas.

 El cambio vial no solo dejó satisfechos a los conductores, también la dirigencia comunal de sectores como Natilan, Antonia Santos, Kennedy, Niña Ceci, El Progreso, Nuevo Horizonte, 7 de Agosto, Caño Limón, Simón Bolívar, Ciudad Jardín, La Libertad, El Pórtico, entre otras, se expresó agradecida por la mejoría de sus calles.

“Tuvimos que esperar 40 años para que un gobierno invirtiera en la recuperación de la malla vial de nuestro barrio”, dijo Hugo Rey, presidente de Asojuntas en Antonia Santos.

La recta final

La carrera por seguir tapando huecos continuará en 2015, porque el reto de la administración municipal es dejar al menos 120 kilómetros de vías rehabilitados.

El secretario de Infraestructura, Juan Carlos Sierra, reveló que para la entrante vigencia y cierre del mandato de Ramírez, se tiene para recuperación de vías $8 mil millones, que se van a destinar para el programa de Comunidad – Gobierno y para seguir tapando huecos en los barrios. 

A parte de esto, hay aprobados los recursos de los otros 20 mil millones de pesos del crédito para invertirlos en la malla vial.

Inversión en la malla vial desde el 2012 hasta el 2015

2012 - 2013

$31.762 millones: Incluye las zonas de mayor impacto de la ciudad, vías de transporte público urbano y el centro.

Inversión 2014

$47.345 millones: Incluye trabajos de rehabilitación vial en las comunas 1, 2, 4, 5, 6, 7, 8, 9 y 10, más otros proyectos como vía Panamericana, vías acceso Estoraques y Cormoranes (sector Scalabrinni), trabajos de recuperación de movilidad en las vías de la ciudad,  pavimentación Comunidad-Gobierno, mantenimiento vial, recuperación tramos críticos Prados del Norte, pavimentación en adoquín Quinta Oriental, pavimentación Calle 6 avenida Cero (Diagonal Santander), movilidad peatonal sector El Rodeo y pavimentación vía El Pórtico.

Inversión 2015

Las vías a pavimentar con $28.000 millones son:

Comuna Uno: calles 3 entre avenidas 12 y 13, sector del antiguo mercado de El Contento.

Comuna Cinco: calle 1N desde la avenida 7 hacia el canal Bogotá y barrio La Merced.

Comuna Seis: vías principales de la urbanización Trigal del Norte.

Comuna Siete: ruta de bus urbano entre los sitios Canal de Claret y Curva del Pescado.

Comuna Ocho: calle 1N entre puesto de salud El Rodeo y Centro de Desarrollo Infantil El Rodeo; calle 3N entre avenida 5E, barrios Minutos de Dios, Coralinas y sector Cuatro Esquinas.

Comuna Nueve: ruta de bus urbano.

Asimismo, las calles de los barrios programadas en el programa Comunidad-Gobierno.