Jhon Lozano viene de una familia con vena artística. Tiene tíos cantantes, escritores e inclusive, parientes que no conoce, pero sabe que son pintores.
De ahí, es su talento que hoy es muy admirado por quienes conocen a este joven y que ha ido mostrando en su cuenta de Instagram, al que le creó una marca ‘XpresArte’. Allí se puede apreciar los distintos cuadros que ha hecho desde imágenes religiosas hasta animales. “Lo que el cliente pida y desee plasmar”, aseguró.
“No vivía de mi arte sino hasta que llegó la pandemia, porque donde trabajaba cerraron por un tiempo la empresa, y me empecé a preocupar, porque en ese momento mi esposa estaba embarazada y tengo otro hijo”, aseguró Jhon, quien dijo que meses antes de la pandemia alcanzó a hacer un curso de óleo, pero por la emergencia sanitaria no lo terminó.
Sin embargo, no se quedó con los brazos cruzados al perder su empleo y empezó a buscar la madera para hacer los bastidores y así darle rienda suelta a su arte. “Empecé haciendo un retrato de una vecina, que hicimos un intercambio, yo le hacía un dibujo y ella me daba un desayuno sorpresa y a mucha gente le gustó y desde ahí comencé a hacer retratos, la gente me empezó a llamar” contó Lozano.
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También agregó que fue tanto el trabajo que tuvo, que le enseñó a su esposa algunas cosas y entre los dos sacaron adelante los dibujos que les encargaron. Pero gracias a este trabajo, pudo mantenerse durante la llegada de la COVID-19, logrando que conociera la magia que hace con sus manos.
Ahora, Jhon se divide los trabajos con su pareja, mientras llega de trabajar, porque la empresa donde ha laborado, volvió a abrir las puertas y él regresó a su horario de oficina. “Todo es cuestión de pasión y amor; de ahí el resultado de los cuadros”.
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