La rama que más contribuyó positivamente en el empleo en Cúcuta y su área metropolitana, en el trimestre noviembre 2023-enero 2024, fue la de actividades profesionales, científicas y técnicas, con 19,1%; allí, principalmente, las de limpieza, call centers y paisajismo.

Así lo indicó a La Opinión el director encargado del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), Leonardo Trujillo, luego de dar el reporte mensual del mercado laboral, en donde la zona de frontera se ubicó sexta en desempleo, en la tabla de 23 ciudades, con una tasa anual de 12,7%.

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Precisó que la segunda división con mejor comportamiento fue la de alojamiento y servicios de comida, lo cual engloba a restaurantes, cafeterías, servido movió de comida y sitios de estancias cortas.

“También aumentaron las actividades financieras y de seguros en Cúcuta: todo lo que tiene que ver con servicios financieros, excepto la de seguros y pensiones, con un crecimiento de 28,1%”, expresó Trujillo.

Las que contribuyeron negativamente en la ocupación fueron las actividades de asistencia social, administraciones del Estado y establecimientos de educación, con -7,3%; transporte y almacenamiento. 

El funcionario explicó que, igualmente, disminuyó en ocupación el sector comercio, sobre todo, al por menor de enseres domésticos, alimentos, bebidas y tabaco.

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Respecto al indicador de hace un año (13,8%), Cúcuta tuvo una disminución de 1,1 punto porcentual (p.p.).

Por otra parte, la informalidad ganó terreno y subió 2,7 p.p., tras registrar 63,5%, y ubicó a la urbe en el tercer lugar del podio, por debajo de Sincelejo (69,0%) y Cesar (64,0%). 

La diferencia con la tasa anual nacional (55,7%) fue de 7,8 p.p. En el mismo periodo del año anterior, la ciudad también fue tercera en la tabla.

¿Por qué bajo el desempleo?

Otros datos a destacar es que la población ocupada pasó de 411.000 a 415.000 (+4.000), en el último año, mientras que la desocupada pasó de 66.000 a 60.000 (-6.000). Entonces, no todos lo que salieron del desempleo entraron a la tasa de ocupación. Hay una diferencia de 2.000 personas, ¿a dónde se fueron? 

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A esta inquietud, la coordinadora del Observatorio Regional del Mercado Laboral (Ormet), Sharyn Nataly Hernández Fuente, señaló a La Opinión que es necesario resaltar que, cuando se mide la tasa de desempleo, se busca la relación porcentual entre el número de personas que están buscando trabajo y el número de personas que integran la fuerza laboral.

“Una modificación, por ejemplo, en la cifra de personas en búsqueda de empleo haría modificar el indicador, aun cuando la población económicamente activa no cambia. La disminución puede responder a factores positivos, como el incremento de plazas laborales formales en sectores de la economía”, agregó la economista.

La también decana de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Libre expresó que ese indicador también puede suponer que parte de quienes buscaban empleo dejaron de hacerlo.

“Y esto obedece a retiros del sistema, salida del país (o al menos traslados a otras ciudades) incremento de la cantidad de emprendedores por cuenta propia, que ya no buscan empleo, porque están en su propio negocio, entre otros”, sostuvo.

La directora del Ormet de Norte de Santander informó que, confiando en que las estrategias públicas encaminadas al fortalecimiento del sector productivo y emprendimiento se mantengan, “se puede esperar un auge del autoempleo, con una disminución del desempleo”.

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