La composición de los hogares ha cambiado en Colombia con el pasar de los años. En 1997, solo una cuarta parte de estos (25,8%) tenía una mujer como jefa, es decir, que el 74,2% era encabezado por un hombre, según datos revelados por Asobancaria en febrero de este año.

Esa participación del hombre se redujo, en 2013, a 64% y la de la mujer creció 11 puntos porcentuales hasta 36%, según señaló un informe del Observatorios de Familias del Departamento Nacional de Planeación (DNP).

Lea además: El secreto mejor guardado de Cúcuta: La empresa que está transformando el futuro digital

Diez años después, de acuerdo con datos de la reciente Encuesta de Calidad de Vida (ECV) 2023 del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), el 54,6% de los hogares están bajo la jefatura masculina y el 45,4%, femenina. 

En Norte de Santander, 290.000 hogares son liderados por un hombre. De estos, 220.000 (75,7%) son biparentales (padre y madre, con o sin hijos). 

Mientras que 16.000 (5,4%) son monoparentales (solo papá). En este caso, la región está por debajo del promedio nacional (7,1%). El menor indicador lo tiene Guainía (4,1%), siendo Norte de Santander el segundo, seguido por Cesar (5,5%).

Le puede interesar: El club de fútbol que enseña valores en las invasiones de Cúcuta

Un año atrás, en 2022, la ECV revelaba que el 5,2% de los núcleos familiares tenía como jefe a un hombre sin cónyuge y con hijos menores de 18 años. Esa leve variación de 0,2%  significa un aumento de 1.000 hogares, aproximadamente.

Cambios en los roles

La coordinadora del Observatorio Regional del Mercado Laboral (Ormet), Sharyn Nataly Hernández Fuentes, indicó que los estudios desarrollados les han permitido observar que la participación laboral de la mujeres madres cabeza de hogar se ha incrementado, teniendo en cuenta que les ha tocado ser las proveedoras en sus casas.

Entonces, el hombre ha reducido su protagonismo, porque su pareja ha acudido al autoempleo o emprendimiento o asumido cargos en los que no requieren ser profesionales (servicios generales, auxiliares de cocina, entre otros).

Lea también: ¿En qué consiste el nuevo Subsidio para Jóvenes en Norte de Santander? director regional del DPS lo cuenta

“Sigue existiendo la brecha, porque, aunque los padres solteros también tienen una responsabilidad en la crianza de los hijos, es más común ver a las mujeres con la custodia y tenencia de los niños. Los padres solteros tienen mayor facilidad para acceder empleos, en donde pueden cumplir horarios habituales, porque la custodia de los hijos no interfiere en su participación laboral”, afirma la economista. 

De acuerdo con la psicóloga Franlet Rocío Araque Castellanos, coordinadora del Semillero de Investigación Pazalapaz de la Universidad Simón Bolívar, hay cada vez menos hogares nucleares de la forma tradicional (papá y mamá) y esto lleva a que las jefaturas no sean exclusivamente femeninas.

Igualmente, esto se puede explicar por los cambios socioculturales y psicológicos en la sociedad, que han hecho que las mujeres tengan cada vez más participación en la economía de la familia, por lo que los padres han asumido otras posiciones.

“Hay una transformación de los roles de género que teníamos establecidos, en lo que se tenía al padre como el proveedor del hogar, la figura racional y de la fuerza física; tienen un rol más protagónico, más paternal”.

La experta señala que hay estudios de hace 30 años que muestran esa tendencia en los cambios de roles, en donde el hombre tiene una paternidad más activa, no solamente racional, sino desde lo emocional, lo cual mejora su salud mental, existiendo menores riesgos de que ocurran trastornos afectivos.

Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en https://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion