En el marco del Día Internacional del Tequila que se celebró el pasado 24 de julio, la recién aterrizada en Colombia, Tequila Don Ramón, celebra la rica historia y tradición de esta emblemática bebida mexicana, enseñándonos a los colombianos los datos más reveladores y desconocidos hasta ahora.
En primer lugar, la elaboración del tequila es un proceso artesanal que se ha transmitido de generación en generación. Desde la selección y jimado del agave. Pero ¿qué es el agave? Esta es la planta dónde esta bebida autóctona mexicana encuentra su origen, más específicamente en el Agave Azul Tequilana Weber.
Esta materia prima es cultivada y cosechada en los altos de Jalisco en México y tiene un tiempo de maduración estimado de entre 5 y 8 años para luego ser destilado y convertido en una de las bebidas espirituosas más consumidas por los colombianos, de hecho, según el Consejo Regulador del Tequila, Colombia es el segundo país de América Latina que más lo consume.
Tequila Don Ramón, por ejemplo, selecciona cuidadosamente agaves de 8 años de maduración para permitir que alcancen su nivel óptimo de azúcar, y aunque conservan técnicas artesanales tradicionales, también han desarrollado tecnología avanzada que permite procesar la materia prima de formas innovadoras que suman calidad y sabor único al producto final. Es así que, sustituye el aire por ozono durante el proceso para lograr una suavidad única en sus tequilas y con un método de extracción en crudo obtiene mayor líquido de cada piña; utilizando solo 5 kilos de agave para producir 1 litro de tequila cuando el promedio utiliza más de 8 kilos.
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No solo la producción sino la conservación determina la calidad y la diferencia del producto.
Diferencias en la maduración: Reposado vs Añejo
Un aspecto distintivo del tequila es su maduración en barricas. El tequila reposado es almacenado de 2 a 12 meses, mientras que el añejo madura de 1 a 3 años en barricas de roble. Tequila Don Ramón adapta estos tiempos según la línea de producto, asegurando perfiles de sabor excepcionales.
“Los tequilas reposados y añejos de Tequila Don Ramón son reconocidos por sus notas distintivas de vainilla, especias frutales y florales, que reflejan la dedicación y el cuidado en cada etapa de destilación. Estas características hacen que Tequila Don Ramón sea una opción destacada para aquellos que buscan experimentar la esencia auténtica del tequila mexicano”, aseguró Ernesto Acuña, director de Marketing de Tequila Don Ramón.
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Identificación de un buen tequila
Para reconocer un tequila de calidad, es crucial verificar que sea 100% de agave y que cumpla con los estándares del CRT (Consejo Regulador del Tequila). Además, observar el color y degustar el sabor permite apreciar sus características únicas desde el primer sorbo, es importante determinar que no hayan azúcares añadidos de terceras fuentes ya que esto podría cambiar el sabor de la bebida.
Se recomienda servir sus productos en copas tipo flauta para apreciar los aromas complejos, acompañados de agua y frutas de temporada. Además, cada tipo de tequila puede maridarse con distintos alimentos para realzar su sabor.
Así mismo, se estima que hay más de 50 competencias de tequila que se celebran anualmente alrededor del mundo. A la hora de elegir un buen tequila se recomienda ser curiosos en la investigación de qué reconocimientos ha recibido ese tequila que se va a elegir.
Por lo tanto, a la hora de elegir un buen tequila se recomienda revisar en primer lugar que sea un producto 100% de agave, en segundo lugar verificar si es reposado o añejo, elegir los sabores más frutales para poder maridarlo y finalmente curiosear sobre los reconocimientos que ha recibido alrededor del mundo.
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