Siete refinerías ilegales con más de 670 mil galones de crudo fueron inhabilitadas en la zona rural del municipio de Tibú, como resultado de un trabajo conjunto entre el Ejército Nacional, la Fuerza Aérea y la Fiscalía General de la Nación.
Los militares llegaron hasta la vereda Caño Victoria, donde se hallaban estas refinerías dedicadas a destilar gasolina procesada, conocida como pategrillo. El crudo encontrado en esta zona había sido hurtado del oleoducto Caño Limón-Coveñas.
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En el lugar se evidenció una grave afectación al suelo, así como a las fuentes hídricas y el bosque.
Estas refinerías, que tendrían un valor de más de 5.000 millones de pesos, albergaban más de 670.000 galones de crudo, 18 piscinas artesanales de almacenamiento y otros elementos utilizados para cometer este delito.
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En esta zona del departamento tiene injerencia el ELN, por lo que se presume serían los responsables del hurto al oleoducto.
Esta acción constituye el segundo golpe en menos de 10 días que el Ejército propina a este tipo de estructuras, pues la semana pasada dos refinerías más, usadas para el mismo propósito ilegal, fueron destruidas en la misma zona.
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El Ejército Nacional continuará adelantando operaciones que permitan contrarrestar los factores de inestabilidad que afectan la región.
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