Desde el 1 de agosto hasta hoy, veinte personas han muerto en accidentes de tránsito, en Cúcuta, según las cifras de la Seccional de Tránsito y Transporte de la Policía Metropolitana.
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Y es que a pesar de los controles que hacen las autoridades en los lugares donde más ocurren accidentes (Atalaya Primera y Segunda Etapa, Antonia Santos, Carora y el centro), las causas más comunes que generan estos sucesos son el exceso de velocidad, así como la imprudencia vial.
Precisamente, por esta última razón fue que Elizabeth Barrera García perdió la vida la noche del martes, después de estar durante seis días en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de un centro asistencial, luego de haber sido atropellada por una motocicleta, en el Anillo Vial Oriental.
Según se conoció, a las 10:00 de la noche, del pasado 5 de octubre, alrededor de la institución educativa Santa Rosa de Lima, en Los Patios, Barrera fue arrollada por un motociclista que participaba en los denominados piques ilegales, en los que cientos de motos se dan cita en el Anillo Vial, para adelantar carreras y maniobras peligrosas.
“Son unos desadaptados. Esas personas que se suben a hacer piruetas en las motos deberían ser procesadas por homicidio, están poniendo en riesgo la vida de mucha gente por sus imprudencias”, dijo uno de los familiares de la mujer, de 51 años, mientras se cumplían las honras fúnebres de su ser querido.
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Al parecer, Elizabeth Barrera estaba parqueada a un costado de la vía con su motocicleta, esperando a que llegara una amiga para irse, cuando una motocicleta la atropelló de manera repentina. En el hecho otra persona también resultó herida.
“Ella (la víctima) era una excelente piloto y, al parecer, un conductor, no sé si tomado (ebrio) o qué, mientras andaba por la vía la atropelló y otra persona más quedó lesionada, pero la que más sufrió fue Elizabeth”, explicó el familiar.
La mujer en ese momento fue auxiliada y trasladada a una clínica, en donde estuvo los últimos seis días luchando por su vida, pero no volvió a despertar.
“Estuvo inconsciente desde el accidente, y el martes tuvo una complicación y murió. Por suerte, el tipo que la accidentó está identificado desde esa noche por los agentes de tránsito y vamos a hacer todas las diligencias judiciales necesarias para que pague por esta muerte. No va a quedar impune”, insistió el doliente.
La mujer, que había trabajado 15 años en el Inpec y actualmente era comerciante independiente, también fue reconocida como vocera de la comunidad LGTBIQ+ durante un largo tiempo, por lo que la Gobernación de Norte de Santander lamentó su muerte.
“La Secretaría de la Mujer, Equidad y Género lamenta el fallecimiento de Elizabeth ‘La Guardiana’, quien se destacó por su gran carisma, alegría y compromiso por su comunidad LGBTIQ+. Elevamos un mensaje de condolencia a su familia, amigos y a la población diversa”, publicó la Gobernación en las redes sociales.
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