El pasado martes, en medio de la Avenida Panamericana a la altura del barrio La Ínsula, quedó tendido el cuerpo sin vida de Ángel Gabriel Jaimes Domínguez, tras un aparatoso accidente de tránsito.

Eran las 10:53 de la noche, cuando el estruendo alertó a los conductores, transeúntes y comunidad que reside en el sector, quienes se acercaron a verificar lo que había sucedido y se encontraron con la lamentable escena.

En la avenida 7 con calle 1, de ese barrio, quedó el cuerpo del joven, de 26 años, y a unos metros, la motocicleta en la que se movilizaba.

Al percatarse de que ya no había nada qué hacer, no tuvieron de otra que llamar a la Policía de Tránsito y Transporte para que atendieran la situación.

La Unidad de Criminalística se encargó de arribar al sitio para adelantar la inspección técnica y el levantamiento del cadáver.

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¿Alcohol o velocidad?

El tránsito vehicular transcurría en completa normalidad al caer la noche del martes, pero, en cuestión de minutos, un choque generó conmoción en el lugar.

Se pudo conocer que cuando Ángel Jaimes se movilizaba en su motocicleta Yamaha 150, de placa IND33G, habría perdido el control de la misma y, en el retorno, colisionó contra el andén.

El siniestro fue tan fuerte que la víctima murió de manera instantánea, por lo que los testigos no alcanzaron a trasladaron a un centro asistencial.

Al parecer, el hombre estaría conduciendo con cierto grado de alcohol y con exceso de velocidad, sin embargo, serán las autoridades las encargadas de determinar realmente qué fue lo que sucedió.

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Una vía peligrosa

La Avenida Panamericana ha sido testigo de diversos accidentes fatales que han dejado innumerables pérdidas en las familias.

Los conductores aseguraron que la vía no cuenta con las condiciones aptas para el tránsito vehicular. Las trampas mortales y la falta de iluminación convierten ese corredor en uno de los más peligrosos de la ciudad.

“Hay alcantarillas que se convierten en huecos muy grandes que, por la falta de iluminación, no se pueden observar a tiempo y se convierten en causales de estos accidentes”, dijo David Durán, conductor de motocicleta.

Añadió que, “hace como dos semanas yo casi caigo en una de esas trampas y de haber sido así, no estaría contando el cuento”.

Por su parte, otro de los conductores fue crítico al asegurar que no hay inversión para ese sector, a pesar de los llamados que en varias oportunidades se han hecho.

“Ningún alcalde se ha interesado en esta problemática. Los vehículos de carga pesada que por aquí transitan mucho, lo que hacen es deteriorar aún más la vía y debería ser una de las que más intervenciones reciba, pero no”, enfatizó Carlos Moreno, conductor de transporte público.

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