Los Juegos Olímpicos de París 2024 han sido uno de los grandes eventos deportivos de todos los tiempos por la importancia de las técnicas inteligentes en la creación y el análisis de información estadística de cada atleta.

La planificación y las competencias deportivas se redefinieron con la ciencia de datos, cuyo impacto en la comprensión, la visualización y estudio de las distintas disciplinas fue analizado por especialistas de la Universidad Simón Bolívar, para quienes la revolución en el manejo de datos transformó “significativamente” las Olimpiadas.

Una de las novedades fue la cantidad de datos generados en el rango de varios zettabytes (ZB). Para hacerse una idea, se estima que un ZB equivale a 17.2 millones de iPhones con capacidad de 64 GB o una película HD de 1080 pixeles y una duración de 36 millones de años.

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Miguel Ángel Vera, profesor que colidera el Grupo de Investigación en Modelamiento Científico de Datos de la Unisimón, explica que la data se recopila por medio de tecnologías emergentes vinculadas con la integridad de datos (blockchain), la generación de datos biométricos (sensores IoT), modelos simulados de rendimiento, la recuperación de atletas (gemelos digitales) y la optimización del desempeño de los deportistas (algoritmos inalámbricos inteligentes 3D).

“Técnicas avanzadas de ciencia de datos, tales como aprendizaje automático, modelado basado en aprendizaje profundo y máquinas de aprendizaje extremo, permiten aprovechar al máximo los datos recopilados para elevar el desempeño de los atletas y preservar su salud, brindándoles una ventaja competitiva sin precedentes”, agrega Juan Carlos Calabria, coordinador de la Red Iberoamericana de Investigación en Data Science.

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Beneficios y riesgos

En una entrevista concedida en 2013 al Diario AS, el experto español Francisco ‘Paco’ González sostuvo que un partido de fútbol superaba los 8 millones de datos y eventos analizables. Una década después, la biometría deportiva da acceso a información de peso y estatura, fuerza, fatiga, frecuencia cardíaca, ansiedad, estrés y la calidad del sueño, entre otros aspectos. 

Más de 10.000 atletas de 206 delegaciones han sido protagonistas en París 2024, acompañados por decenas de equipos que incluyen técnicos, médicos, fisioterapeutas, masajistas y, por supuesto, analistas de datos.

Pero si bien el uso masivo de internet y la disminución de los costos de almacenamiento masifican el big data deportivo, también hay riesgos: en algunos casos los sistemas no siguen los estándares de calidad establecidos, por lo que incluyen valores nulos, duplicados o inconsistentes.

Según Antonio José Bravo Valero, director del programa de pregrado y la Maestría en Ciencia de Datos, tales fallas pueden afectar la calidad del conocimiento extraído por los modelos de datos y conllevar a decisiones erróneas de los organizadores, entrenadores y equipos médicos.

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“Los datos deben ser de alta calidad, escalables para su procesamiento posterior y adaptables a cualquier entorno que la organización disponga”, dice Bravo. “Es crucial que los sistemas de captura de datos cumplan con los estándares de calidad para garantizar que generen conocimiento preciso, confiable y permitan tomar decisiones informadas durante la realización de estos juegos”.

Impacto múltiple Experiencia de espectadores

La Ciencia de Datos también transforma la experiencia de los espectadores y del público vinculado a las Olimpiadas. Basándose en análisis de datos, los organizadores apostaron por mejorar la logística y la accesibilidad de los eventos y las empresas promovieron sus productos y marcas con experiencias personalizadas y contenido interactivo para millones de espectadores.

“También se han implementado soluciones tecnológicas para hacer los Juegos más inclusivos y accesibles, como la navegación digital y los sistemas de subtitulado automático para espectadores con necesidades especiales”, destaca Miguel Urina Triana, cardiólogo, científico de datos y expresidente de la Sociedad Colombiana de Cardiología y Cirugía Cardiovascular.

Los espectadores han experimentado además la acción deportiva como nunca, a través de plataformas y dispositivos que transmiten las competencias de París 2024 con tecnologías en formatos 4K/8K en vivo, realidad mixta, cámaras avanzadas y sistemas streaming 5G.

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