En Mayfield, arrasada por los tornados del fin de semana, los lugareños dicen que su fe cristiana los impulsa a limpiar escombros, recolectar suministros y convertir sus iglesias en refugios para quienes quedaron sin hogar por una de las tormentas más devastadoras en la historia de Estados Unidos.
La pequeña ciudad en el sur del estado de Kentucky es parte del denominado "cinturón de la Biblia", una franja del sur estadounidense donde la vida se centra en la iglesia.
El domingo, residentes de esta ciudad de 10.000 habitantes mencionaron su fe como una fuerza impulsora para avanzar y ayudarse mutuamente a recoger los desechos dejados por el paso de los tornados.
Vanessa Cooper, de 40 años, estaba tratando de rescatar lo que podía del departamento de su madre, del cual solo quedaban dos paredes en pie.
Cerca de allí, tres amigos despejaron los escombros retorcidos mientras Cooper hurgaba entre los muebles dañados.
Si quieres tener acceso ilimitado a toda la información de La Opinión, apóyanos haciendo clic aquí: http://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion
"Algunas personas de mi iglesia vinieron a ayudar ... Significa mucho para mí", dijo, y agregó que no podría haberlo hecho sola.
"No sé lo que depara el futuro, pero Dios me ayudó a superar muchas cosas en la vida", expresó.
La solidaridad es algo natural en las comunidades pequeñas, dijo Cooper, cuando una vecina le preguntó si necesitaba algo.
Mayfield "siempre ha sido cercano", destaca la mujer, quien trabaja en la escuela secundaria técnica local. "Nos mostramos mucho amor el uno al otro", subraya.