El presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Cristo Rey, Álvaro Angarita, solicitó mayor vigilancia en estos espacios por la presencia de personas extrañas en los alrededores del mirador turístico.
El prelado de la iglesia católica hizo un enérgico llamado a los padres de familia para inculcar valores éticos y morales a sus hijos.
Rechaza los daños causados en las paredes externas del templo de San Francisco indicando que ese acto no solo afecta un lugar del culto católico, sino que atenta contra el patrimonio histórico y cultural de los ocañeros.
“Los bienes culturales, históricos y religiosos de la región se constituyen en patrimonio que nos pertenecen a todos. Como iglesia tenemos sitios muy lindos para el culto, lastimosamente en los últimos días nos hemos percatado de una agresión a uno esos lugares emblemáticos para nosotros no solamente espiritualmente, sino desde el punto de vista histórico ya que se desarrolló en el año de 1828 la gran Convención de Ocaña”, precisó.
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La comunidad ocañera rechazó este tipo de acciones violentas que afectan espacios emblemáticos para el municipio.
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