*Walter Pérez lleva cinco años con su camioneta de gama media, de placas colombianas. Estaba acostumbrado a reemplazar sus repuestos y llantas por originales, sin importar el costo que tuvieran. Sin embargo, actualmente sus ingresos se redujeron y el vehículo dejó de ser prioridad. Para este año, el desgaste de los cauchos fue notorio y urgente, por lo que el cambio no dio espera.

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La decisión fue rápida y sin dudas: había que comprar llantas de segunda, manipuladas y maquilladas para que extendieran la emergencia al menos tres o cuatro meses.

Pérez arribó hacia el barrio El Callejón, donde hay múltiples negocios donde venden este tipo de llantas que, en su mayoría, llegan provenientes de Bogotá y Medellín.

“En Bogotá, la Policía de Tránsito impone comparendos a los conductores que tienen las llantas con más del 50 por ciento del ciclo útil, entonces las personas las cambian por nuevas y por eso acá a Cúcuta llegan esas que desechan”, explicó un hombre que lleva vendiendo este tipo de cauchos al menos 20 años en la zona céntrica de Cúcuta.

La labor del ‘rayador’, el hombre que se encarga de remarcar las llantas con una máquina improvisada es la clave para que las llantas desgastadas tomen una apariencia nueva, con el labrado más notorio y así pasar por alto el control de las autoridades.

 Sin embargo, algunos de ellos confiesan que dicha marcación es prácticamente solo una apariencia física, pues son conscientes de que el neumático no va a durar más de tres meses y según las condiciones mecánicas del vehículo.

“Siempre se busca que la llanta quede con una apariencia nueva, para que la Policía no moleste tanto. Estas llantas son muy compradas acá en Cúcuta y también las llevan mucho hacia Venezuela”, dijo uno de los ‘rayadores’.

Y es que la diferencia de precios con el mercado lleva a que los conductores se inclinen en muchas ocasiones por comprar estas llantas usadas, que también podrían estar siendo utilizadas para pasar las revisiones técnico-mecánicas obligatorias.

En El Callejón, un par de llantas se consigue en 120 mil pesos, mientras que ese mismo par nuevo puede costar al menos $440 mil, según la marca.

“Uno es consciente de que son llantas usadas, pero por el bien del bolsillo toca comprarlas, para poder solucionar por el momento y no gastar tanto dinero, que se necesita para otras cosas”, explicó Pérez, mientras señala los cauchos que aparentan tener una vida útil larga.

‘Es ilegal’

El mayor Giovanny Chávez, jefe de la Seccional de la Seccional de Tránsito de la Policía Metropolitana de Cúcuta, explicó que la venta de estas llantas es ilegal y además, genera riesgos de accidentes.

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Asimismo, dijo que las llantas cumplen con una vida útil y si esta se usa estando lisa, el conductor comete una infracción que es sancionada por el Código de Tránsito, con una multa que puede costar medio salario mínimo legal vigente mensual.

“Esta sanción se debe a poner en desplazamiento un vehículo sin las condiciones tecnico-mecánicas pertinentes, en este caso, las llantas”, explicó el oficial.

Un proceso penal

El mayor Chávez fue enfático al asegurar que, si ocurre un accidente de tránsito en el que resulte una persona herida o fallecida y las investigaciones que adelante la Fiscalía determinen que uno de los factores del siniestro fue la mala condición de las llantas, el conductor del vehículo involucrado puede enfrentar un proceso penal que podría derivar en una medida de aseguramiento en prisión.

El oficial insistió en que, usar las llantas que no están en condiciones óptimas para el desplazamiento genera un riesgo latente para que ocurran accidentes de tránsito, que pueden terminar en un atropellamiento, en no tener la capacidad de frenar en el tramo adecuado y por lo tanto, expone a los demás usuarios de la vía, incluyendo también al conductor que las usa.

“Con estas llantas las condiciones del vehículo no son las adecuadas, es menor la probabilidad de evitar un accidente y el carro que tiene estas llantas es más vulnerable a un volcamiento”, explicó.

No obstante, las autoridades de tránsito aseguraron que se incrementarán los controles para detectar el uso de estas llantas que cumplieron su ciclo útil y que siguen rodando por las calles de Cúcuta y el área metropolitana.

Una de las causas recurrentes

Un experto en accidentes de tránsito aseguró que, aunque los errores del ser humano generan el 70 por ciento de las causas de los accidentes en Cúcuta, es seguida por las fallas mecánicas, en las que el uso de las llantas regrabadas tienen un papel determinante.

“Estas llantas al ser regrabadas no son seguras, porque alteran las medidas de fabricación original, por lo que esto genera un alto riesgo de accidente. Esta variable es recurrente en los siniestros, convirtiéndose la falla mecánica en la segunda causa imponente en estos hechos”, dijo.

Agregó que es importante instar a tener conciencia de que usar estos elementos no aptos para el buen funcionamiento de los vehículos configuran un peligro en las vías que puede dejar saldos fatales.

*nombre cambiado.

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