En el último mes han ocurrido cuatro homicidios que tendrían relación con la compleja situación criminal que se está dando en la zona céntrica de Cúcuta y que, a pesar de que las autoridades han tratado de frenarla, los esfuerzos siguen siendo insuficientes.

Una muestra de eso son los mensajes que le dejaron a dos de las víctimas. En una de las hojas de papel, los homicidas escribieron: “Esto es para que no se crean inmortales. Todo es regalado, prestado, como este pirobo, tendrá el mismo premio, para que respeten a la gente inocente, plomo para ‘Los Lobo’, ‘AK-47’ y ‘Porras’, ya saben brujas, en la calle nos encontramos. Muerte paracos hps. Att: El hampa”. Mientras que en la otra nota solo se alcanzaba a leer: “El hampa del Callejón”.

Le puede interesar: Tres contratos llevaron a la extinción de dominio a dos exalcaldes de Cúcuta

“Los mensajes son claros, precisos y concisos, mostrando la guerra que se da en el centro de Cúcuta por el control del microtráfico y las extorsiones de las bandas criminales que quieren dominar esa zona. Esto sucede a unas cuantas cuadras de la Alcaldía y la Gobernación, pero pareciera que lo gobernantes no miran a su alrededor”, aseguró un líder social que por seguridad pidió reserva de su identidad.

Y para las autoridades es claro que estas cuatro víctimas recientes, identificadas como Juan David Camero Cuartas, asesinada en El Llano; Luis Antonio Enrique Blanco, alias ‘Patiño’, muerto en El Callejón; Jeanpier Alfonso Escorihuela Pinto, ‘Búho’, baleado en El Callejón; y ‘El Cabezón’, crimen sucedido en Cerro Norte, tendrían relación directa con ‘Los AK47’.

“Las primeras hipótesis nos están dirigiendo hacia esa banda criminal porque algunas de esas personas asesinadas pertenecieron a ella o les compraban y vendían drogas”, manifestó una fuente cercana a las pesquisas.
 

El imperio de esta banda criminal

Entre el estrés y el trajín diario de la zona céntrica de Cúcuta se camufla un ‘imperio del terror’ que, durante más de tres años, ha sembrado la banda criminal conocida como ‘Los AK47’ o ‘Los Alemanes’, pero que muy pocos comerciantes o habitantes se atreven a denunciar.

Esta organización ilegal que es dirigida por Jhoswar Saúl Hernández Sanabria, conocido como ‘S’ o ‘Saúl’, hoy tendría a su servicio al menos medio centenar de personas que se encarga de la comercialización de drogas en los parques Lineal, Antonia Santos, 300 años y Juana Rangel de Cuellar, además, de diferentes puntos en los barrios El Callejón, Carora, Pueblo Nuevo y Latino o también por los alrededores del estadio General Santander.

Lea también: Pelea a muerte entre bandas por venta de drogas en el centro de Cúcuta

Este negocio ilícito le estaría dejando ganancias diarias de al menos 20 millones de pesos a esa banda, según cifras que manejan las autoridades. Los precios de las dosis varían: la marihuana y el bazuco cuestan entre $10.000 y $15.000, mientras que la heroína es un poco más costosa, puede llegar a valer $20.000, aunque no es pura, porque la ligan con un químico que la hace más fuerte y la dosis que venden no llega ni a pesar un gramo. La base de coca también tiene un costo que oscila entre $10.000 y $15.000.

Sus principales ‘clientes’ y expendedores son los habitantes de calle que abundan por doquier el centro de la ciudad. Varios miembros de la banda se encargan de cuidar a los jíbaros y de evitar que algún vendedor de drogas de otra red llegue a la zona que dominan.

Y precisamente, para mantener el control total, a ‘Saúl’ no le tiembla la mano a la hora de ordenar un asesinato, como viene ocurriendo y que, según las autoridades, ya habría cometido alrededor de 50 homicidios, en los últimos tres años, entre los que figura una masacre en el barrio Pueblo Nuevo, en 2022. “Él dice que quien no trabaja con su banda, está en contra y por eso va matando al que sea”, explicó una fuente judicial.

¿Quién es ‘Saúl’?

Lo que las autoridades han logrado establecer sobre Jhoswar Saúl Hernández es que hace cinco años comenzó a delinquir con el Tren de Aragua, pero luego de un año de estar en el barrio La Parada, de Villa del Rosario, que limita con Venezuela, decidió abandonar esa banda y montar su estructura para tomarse la zona céntrica de Cúcuta.

“‘Saúl’ lo primero que hizo fue buscar unos jóvenes venezolanos y luego de meterlos en el mundo de las drogas, los puso a vender narcóticos en diferentes puntos del centro de Cúcuta. Ya cuando estaba fortalecido, buscó nuevamente al Tren de Aragua para que le ayudara a financiar la compra y venta de drogas. Entonces, el Tren lo surte y él con su combo la comercializa”, comentó otra fuente judicial que le sigue el rastro a Jhoswar Hernández.

Pero las autoridades comenzaron a escuchar fuertemente sobre lo que estaba haciendo ‘Saúl’ con su banda ‘Los AK47’ el año pasado, cuando los homicidios y los hechos violentos en el centro de la ciudad se incrementaron. 

Además, La Opinión en una investigación que hizo sobre microtráfico en septiembre del año pasado en la zona céntrica de Cúcuta, reveló por primera vez una foto del peligroso Jhoswar Saúl Hernández y contó datos que hasta el momento eran desconocidos para la comunidad.

“‘Saúl’ está metido en más de 50 homicidios, entre ellos el de un expolicía, en medio de un atraco, y el de otros consumidores de droga que se negaron a comprarle los estupefacientes a ‘Los AK47’”, contó la fuente judicial.

Le puede interesar: 'Saúl' mantiene a Cúcuta entre atentados y muerte

 
‘Saúl’ se apoderó de la zona céntrica de Cúcuta porque las ventas de drogas le estarían dejando ganancias millonarias. “Se calcula que mensualmente estaría recibiendo sumas millonarias, por eso es que tiente tanto poder”, sostuvo la fuente.

Los investigadores que le siguen el rastro a ‘Saúl’, también han conocido que a él lo capturaron en Venezuela por tráfico de estupefacientes y por porte ilegal, siendo menor de edad. 

Intimidaciones, extorsiones y homicidios

Pero las autoridades también saben que ‘Los AK47’ dominan las zonas donde hay explotación sexual, cobrándoles a las mujeres y a los integrantes de la comunidad LGBTIQ+ $100 mil semanalmente, y quien no pague es golpeada y amenazada.

“Once personas pusieron la denuncia por este tipo de extorsiones y es así como se le está haciendo seguimiento a esta banda por este delito”, manifestó otra fuente judicial.

En varias oportunidades, representantes de la comunidad LGBTIQ+ han denunciado por lo que están pasando en el centro de la ciudad, pero hasta el momento, según aseguran, no ven resultados de las denuncias que han puesto ante la Fiscalía.

Y precisamente, para no perder ese control territorial que tiene la banda de ‘Saúl’ e infundir más miedo en el centro de la ciudad, vienen ocurriendo asesinatos y ataques con explosivos, como el del pasado 17 de abril, en el parque Mercedes Ábrego.

Ese día, dos hombres de ‘Los AK47’ buscaron a un habitante de calle y luego de amenazarlo y de entregarle 20 dosis de bazuco, le dijeron que tenía que llevar un artefacto explosivo hasta una caneca que estaba diagonal al CAI del parque Mercedes Ábrego, y minutos después lo activaron, asesinando a una mujer y dejando a varias personas heridas.

Por este hecho, Policía Metropolitana, Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) y Fiscalía, capturaron a Kewer Alejandro Moreno, conocido como Pelón.

El peligroso Jhoswar Saúl Hernández también es responsable de la masacre que se registró el 27 de agosto de 2022 en el barrio Pueblo Nuevo, de Cúcuta, donde cuatro personas fueron asesinadas.

Le puede interesar: El imperio de 'Saúl' sigue entre terror y muerte en el centro de Cúcuta

“Por ese homicidio colectivo capturamos a tres sicarios de ‘Saúl’, que estaban involucrados en este hecho y luego de obtener el material probatorio fueron enviados a prisión”, sostuvo una de las fuentes judiciales.

La Policía Metropolitana de Cúcuta resaltó que en el último año a ‘Los AK47’ les han capturado al menos 30 de sus integrantes, entre homicidas y expendedores de drogas, pero a pesar de esos golpes, la banda no ha sido desmantelada y sigue involucrando más personas para delinquir y no perder el dominio territorial.

Entre los recientes capturados está Wilson Levy Guerrero Córdoba, alias Cheo, quien es compadre y mano derecha de ‘Saúl’.

Los investigadores judiciales también han logrado establecer que el combo de ‘Saúl’ está vinculado en otros homicidios, como el ocurrido la noche del pasado 15 de marzo, en la avenida 8 entre calles 1 y 2, del barrio El Callejón, donde César Augusto Suárez Martínez falleció y su esposa quedó herida, en medio del robo de $40 millones.

Además, estarían relacionados a algunos atentados con granadas como los registrados en octubre de 2022, en la calle 5 con avenida séptima, de El Callejón, contra un bar, o en febrero de este año, en el mismo sector, contra una peluquería y el de marzo, contra la empresa de taxis Cone, en el barrio Cundinamarca.

“Esos hechos que se han cometido con lanzamiento de granadas y que han dejado varios heridos, se dan porque la gente se niega a pagar las extorsiones, entonces ‘Saúl’ ordena de inmediato los ataques”, contó otra fuente judicial.

Añadió: “en los allanamientos hemos encontrado unos celulares donde ‘Saúl’ les escribe a esos delincuentes, desde números telefónicos de otros países, dándoles órdenes e indicándoles qué deben hacer”.

Ahora, las autoridades han fijado sus acciones en contra de alias ‘Maracay’ y ‘La Gocha’, quienes serían los líderes de las extorsiones y ventas de drogas, y ya tienen orden de captura, pero se han logrado escapar de las recientes acciones policiales.

Los investigadores ya han podido establecer que ‘Saúl’ estaría coordinando con los hombres que le quedan en la calle por medio de llamadas y videollamadas por WhatsApp, para evitar que lo rastreen fácilmente, pues se estaría moviendo entre Colombia y Perú.

Lea también: ‘Los AK47’ lanzan amenazas contra el Inpec y reclusos en Cúcuta

Las autoridades también conocieron que ‘Los AK47’ hicieron una alianza con ‘Porras’ y con la banda ‘Los Lobo’ para tener un control total en sus zonas de dominio y apoyarse entre ellos por si alguna organización ilegal como el Eln, Tren de Aragua o gaitanistas quiere enfrentarlos para quitarles el terreno.

“En un patio de la cárcel de Cúcuta se dio la alianza y para mostrarlo, pintaron un mural donde hay algunas figuras, entre ellos una moto (como símbolo del sicariato)”, comentó la fuente.
 

Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en https://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion