Detrás del macabro hallazgo del cadáver de una mujer dentro de un carro Chevrolet Spark, la mañana del jueves, en el barrio Santa Bárbara, de Villa del Rosario, hay una tenebrosa historia que involucraría a miembros de la banda criminal Tren de Aragua.

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A medida que avanzan las horas desde que se conoció el asesinato de la mujer, las autoridades pudieron comprobar que ella sí era Yessica del Valle Cabrera Fajardo, la propietaria del vehículo de placas AA397WT, en el que fue encontrado el cadáver, en el asiento trasero, en la calle 23 con carrera 9.

Las autoridades también conocieron que la víctima había sido secuestrada desde las 7:00 de la noche del miércoles, junto con su mamá, en el barrio La Parada, del municipio histórico, por dos hombres que les exigieron una millonaria suma para dejarlas en libertad.

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“Lo que se conoció es que, al parecer, mamá e hija iban a transportar a los dos hombres hasta un hotel ahí en La Parada, pero en ese momento los desconocidos las intimidaron con pistolas y las llevaron hacia una casa del sector para extorsionarlas”, explicó una fuente judicial.

Según se conoció, los presuntos miembros del Tren de Aragua les exigieron a las víctimas inicialmente 50 mil dólares a cambio de dejarlas libres, a lo que ellas les insistieron que no tenían esa cantidad de dinero, por lo que después la exigencia bajó a 1.000 dólares.

Pero el macabro destino ya estaba escrito. Horas después, la mamá de Cabrera fue dejada en libertad en una población fronteriza con San Antonio del Táchira (Venezuela), mientras que ella fue asesinada de cinco impactos de bala.

Al atardecer del jueves, los familiares de la víctima arribaron a la Fiscalía y adelantaron los trámites para reclamar el cadáver de su ser querido.

¿Quién era?

Las autoridades conocieron que Yessica Cabrera Fajardo vivía en Palotal, una población fronteriza de Venezuela. La mujer se dedicaba a comprar diferentes mercancías en Cúcuta y Villa del Rosario y las comercializaba en el país vecino.

Por ahora avanzan las pesquisas para verificar la información que se ha conocido por el crimen de la mujer, que generó impacto y temor entre los habitantes de Villa del Rosario.

El hecho

A las 9:30 de la mañana del jueves, una persona alertó a la Policía Metropolitana de Cúcuta del hallazgo del cadáver en el carro de placas venezolanas.

Cuando los uniformados estaban en el lugar también se enteraron de que algunas personas vieron sospechoso el vehículo, porque estaba mal estacionado y, además, al acercarse, observaron que por el costado derecho de la parte de atrás, salía sangre, lo que les causó mucha curiosidad y al arrimarse al vehículo, vieron el cuerpo de la mujer.

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Media hora después del macabro hallazgo, las unidades de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) llegaron al lugar e iniciaron la inspección técnica, pero luego de unos minutos decidieron llamar a los técnicos antiexplosivos para que revisaran el automotor, pues querían evitar que se tratara de una trampa mortal.

Antes de las 12:00 p. m., los expertos en explosivos llegaron junto con un perro e inspeccionaron el carro y al ver que no había ningún riesgo, abrieron las puertas para que los peritos forenses siguieran con la diligencia judicial.

La Brinho se encargó del levantamiento del cuerpo y de trasladarlo al Instituto de Medicina Legal. En la escena del hecho fueron halladas dos vainillas que van a ser analizadas en estudios balísticos para hallar cualquier pista sobre los autores del hecho.

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