El oficio de zapatero y marroquinero se mueve en un escenario en constante evolución que permite la integración de técnicas tradicionales manuales con tecnologías computarizadas, como el diseño asistido por computador (CAD) y la fabricación asistida por computador (CAM), para crear calzado y productos de marroquinería innovadores, y de alta calidad, ofreciendo un amplio espectro de posibilidades creativas e innovadoras al combinar materiales, materializar diseños y fusionar el confort con la estética.
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Un oficio que, desde el programa técnico de Fabricación Industrial de Marroquinería del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) ha obtenido grandes reconocimientos, el más reciente, en las competencias WorldSKills, donde una de sus aprendices ganó medalla de oro.
Se trata de Marly Lisbeth Patiño Meza, una joven aprendiz de 19 años, quien con mucha dedicación y proyectada a ganar, hoy se encuentra en su etapa productiva en una empresa de marroquinería en el municipio de Villa del Rosario, donde se ha destacado por su gran profesionalismo.
“Ser la ganadora de WorldSKills fue un orgullo, porque dejé en alto el nombre de mi departamento. Además, se me abrieron varias puertas y adquirí un conocimiento increíble”, cuenta Marly.
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Y es que, el año pasado, durante tres meses, Marly Lisbeth alternó las jornadas de formación con una preparación exhaustiva junto con el instructor Gilberto Duarte, para lograr el resultado al competir en la habilidad de calzado y marroquinería contra las regionales Antioquia, Distrito Capital y Santander en las competencias WorldSkills Colombia, una estrategia del SENA, que busca mejorar la calidad de la formación profesional integral, identificando a partir de competencias, aprendices de alto rendimiento en diferentes habilidades técnicas y tecnológicas del país.
Después de pasar 3 pruebas, el jurado la eligió como la ganadora, tras haber realizado los mejores bocetos, prototipos y moldes sobre pequeña y mediana marroquinería.
Una profesión que, asegura Marly, eligió porque quería aprender todo lo relacionado con este arte basado en la manipulación y trabajo con el cuero.
“Muchos me preguntan que por qué elegí esta carrera cuando podía haber estudiado algo de administración, pero a mí me parece que es muy importante aprender siempre un arte diferente y para mí ha sido excelente, porque es un trabajo que puedo llevar a cualquier parte, no solo como empleada, sino que puedo crear mi propio emprendimiento y esa es la meta”, añadió la joven.
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Y es que las cualidades y los conocimientos de esta aprendiz siguen consolidándose, lo que le permite ser reconocida por los directivos de la empresa en la que actualmente desempeña su etapa productiva.
Así lo aseguró Andrés Cardona, jefe de planta, quien manifestó que la labor que ha desempeñado Marly Patiño en esta organización ha sido un proceso enriquecedor.
“La marroquinería es de detalles y ella está pendiente de cada detalle. Ha desarrollado muy bien el trabajo gracias a lo que le enseñaron en el SENA, con muy buenos conocimientos y un excelente desempeño. Nos ha sorprendido, nos ha colaborado y también nos ha enseñado”, dijo Cardona.
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Frente a estos resultados, Marly contó que, empezó como auxiliar de marroquinería, pero desde esta semana pasará a ser parte del grupo de armadores, lo que representa un ascenso laboral y una experiencia que le permitirá adquirir nuevas habilidades profesionales.
“Quiero decirle a los jóvenes que aprendan cualquier arte, que es una experiencia espectacular, porque se adquiere un conocimiento y se puede trabajar para luego pagar más estudios y llegar hasta la universidad, aprender y emprender”, mencionó.