Preocupados se encuentran los padres de familia del municipio de Tibú, porque están denunciando que en el Colegio Francisco José de Caldas, la única institución del casco urbano, ya no hay cupos escolares para matricular a sus hijos. 

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La Opinión conoció que en los últimos días, a las afueras del plantel se han generado aglomeraciones de acudientes exigiendo que se les asigne un cupo, teniendo en cuenta que las clases empezarán este lunes 23 de enero y muchos niños y jóvenes están en el ‘limbo’. 

“Lo que queremos es que nos den los cupos, porque no tenemos a dónde más mandarlos y nosotros hemos escuchado que en el departamento todavía hay disponibilidad, así que Tibú no puede ser la excepción, nos asignan a todos o ninguno empieza clase el otro lunes”, comentó una madre de familia. 

Ante la tensa situación, la Personería de Tibú tuvo que intervenir, precisando que el jueves, los padres de familia fueron convocados a una reunión con las directivas del plantel, líderes comunales y funcionarios de la administración municipal para buscar soluciones. 

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“Le solicitamos al rector que nos diera un diagnóstico de lo que estaba pasando, cómo estaban manejando el proceso de inscripción y él nos manifestó que sí se estaban recibiendo matrículas, pero que las capacidades de la institución, tanto físicas, como en términos de docentes se quedaba corta”, explicó Jhon Jairo Ascanio, personero de Tibú. 

El funcionario detalló que lo que se sugirió es que se haga una lista de los estudiantes que no han alcanzado a matricularse, para saber cuántos cupos hacen falta, con el fin de que la Secretaría de Educación Departamental los asigne como corresponde. 

Indicó que con respecto a la falta de aulas de clase, ya la oficina de Vías e Infraestructura del municipio realizó una inspección para remodelar y ampliar algunos salones, con el objetivo de garantizar el derecho fundamental a la educación. 

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Secretaría de Educación responde 

Ludy Páez Ortega, secretaria de Educación Departamental, informó que en el colegio sí se está adelantando el proceso de matrículas, pero el problema radica en que los padres de familia dejaron todos los trámites para última hora, ya que las inscripciones iniciaron desde el 15 de noviembre de 2022. 

“La gente se angustia porque vinieron hasta ahora y claro, tienen colapsado al rector, las colas son inmensas, pero ya se les ha hecho saber que a todos se les va a dar cupo, porque es la única institución educativa que tenemos en el casco urbano de Tibú, entonces no podemos negarles, ni pensar en la posibilidad de que algún niño se nos quede por fuera”, dijo la secretaria. 

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Páez sostuvo que se tiene un plan de contingencia para adecuar algunos espacios que puedan servir como aulas de clase, destacando que el proceso de matrículas va a continuar la próxima semana, para determinar cuántos cupos faltan y de qué cursos. 
Aseguró que algunos menores serán reubicados en la sede educativa Marco Fidel Suárez que funciona en horas de la tarde, para incluir a quienes hagan falta. 

Que sí los envíen a clases

La secretaria hizo un llamado a los padres de familia que están es espera de cupos, para que realmente envíen a los niños y jóvenes a las clases, ya que algunos acudientes matriculan a los menores solo para que queden en la base de datos y reciban los subsidios que entrega el Gobierno Nacional. 

“En años anteriores ha sucedido que matriculan los niños y no los mandan a clase, pero sí cobran los subsidios, entonces que les permitan a otros niños de verdad tener su ocupación dentro del establecimiento educativo”, anotó Páez. 

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