Por tomar la justicia por mano propia y asesinar al conductor Hildebrando Rivera Gantiva, de 60 años, quien previamente había atropellado a una mujer Embera y a su hija, los implicados deberán ser juzgados por la justicia ordinaria y no la indígena y podrían pagar 30 años de prisión.
Lea aquí: Desgarrador video y audio de conductor linchado por indígenas en Bogotá
Lo anterior, según explica el abogado penalista Norberto Hernández, porque para que un caso sea competencia de la Jurisdicción indígena se deben cumplir cuatro factores:
“El elemento personal que hace referencia a la pertenencia del acusado de un hecho punible o socialmente nocivo a una comunidad indígena; el territorial que hace referencia a que los hechos objeto de investigación hayan tenido ocurrencia dentro del ámbito territorial del resguardo, el institucional que se refiere a la existencia de autoridades, usos y costumbres, y procedimientos tradicionales en la comunidad y el objetivo que hace referencia a la naturaleza del bien jurídico tutelado. Concretamente, si se trata de un interés de la comunidad indígena, o de la sociedad mayoritaria”.
Pero, según Hernández, no todas las condiciones se cumplen en este caso, por lo que deberán enfrentar su juicio en la justicia penal donde podrán ser imputados por homicidio agravado.
Lea además: Muere linchado conductor que atropelló a dos indígenas
Esto mismo opina el abogado Fabio Humar, quien agregó que en este caso se cometió un delito de homicidio, movido por ánimos de venganza, los que nos acerca a los estados más bárbaros. Agregó que “el accidente de tránsito fue una desgracia terrible pero el homicidio a manos de la turba, es imperdonable. La Fiscalía, tan diligente en casos mediáticos, debe tomar ya cartas en este asunto y judicializar a los bárbaros que cometieron tal acto de venganza”.
*¿Qué pasó?
Los hechos ocurrieron entre las 8:30 y 9:00 de la noche de este martes, en inmediaciones del parque La Florida, lugar donde permanecen en un campamento autorizado, cuando el camión recolector de basuras de la empresa Ecosiecha de Guasca, Cundinamarca, que manejaba Rivera Gantiva las arrolló, en condiciones que están siendo investigadas.
Le puede interesar: Disidencia de Farc arremete contra disidencia Segunda Marquetalia y Eln
Tras este hecho Rivera Gantiva fue atacado por la comunidad indígena, quedando gravemente herido, por lo que fue trasladado a la Unidad de Servicios de Salud de Engativá, a donde llegó con múltiples traumas en cráneo, tórax y abdomen.
En ese lugar fue intervenido quirúrgicamente pero presentó un paro cardiorrespiratorio, que finalmente lo llevó a su muerte.
Tras estos hechos la Fiscalía informó que se hicieron los actos urgentes y ya se encuentra un equipo de fiscales al frente del tema, para investigar lo que sucedió.
Por su parte la alcaldesa de Bogotá, Claudia López se pronunció a través de su cuenta de Twitter lamentado lo sucedido “Llevamos más de 4 meses ofreciéndoles atención humanitaria, sanitaria y de estancia temporal mientras el Gobierno Nacional garantiza primero que no los desplacen de sus resguardos y segundo que puedan retornar seguros a los mismos”.
Lea también: Continúan las tensiones en Arauca: reportan dos explosiones
Bajo esta línea agregó que: “MinDefensa ha sido incapaz de garantizarles seguridad y evitar su desplazamiento y tampoco su retorno. La Unidad de Víctimas apenas ha garantizado el retorno de menos de la mitad de quienes lo requieren. Y el ICBF no ha garantizado la protección plena de los derechos de los niños”.
Últimas palabras
En una entrevista con Bluradio El gerente de la empresa Ecosiech, Mario Calderón, reveló que tuvo una llamada con Hildebrando Rivera Gantiva, justo después del accidente.
“Cuando contesto el teléfono, escuchó mucho ruido y él me dice: ‘Don Mario estoy en el camión, no me dejan bajar, se me atravesó un muchacho, yo no lo vi, estoy en Funza’. Su voz era de desesperación”, relató.
Lea además: Suspenden el porte de armas en Norte de Santander
Agregó que, en ese momento, no entendió qué estaba sucediendo y lo único que le alcanzó a decir fue que se calmara, que él iba a hablar con el alcalde de Guasca, población a la que pertenecía el camión de basura, para que le informara a la Policía.
“Unos minutos después, tal vez 10 o 15, la técnica operativa me llama y me dice: ‘Estoy llamando al teléfono de Hidelbrando, me contestó alguien y me dijo: ‘No llame más a este hp que lo vamos a matar’, y le colgaron”, añadió.
Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en http://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion .