Unidades de la Sijín llegaron hace una semana a la casa de Rodolfo Jáuregui Pérez, ubicada en el barrio San Luis. La orden era cumplir con un registro y allanamiento, porque algunas personas les informaron a los investigadores que a pesar de que él estaba pagando una condena con detención domiciliaria, seguía delinquiendo.
En medio del procedimiento judicial, los policías lograron corroborar que las denuncias eran ciertas, pues a Jáuregui Pérez, de 53 años, le hallaron dos balas calibre 9 milímetros, 20 gramos de bazuco, 25 dosis de marihuana, 5 de cocaína, 10 de heroína y dos grameras.
Por lo encontrado, las autoridades capturaron a este hombre por tráfico, fabricación o porte de estupefacientes y ahora tendrá que enfrentar un proceso judicial por esos delitos desde la cárcel.
¿Quién es?
Rodolfo Jáuregui ya había sido detenido el 19 de agosto de 2020, por presuntamente pertenecer a la banda criminal 'Los del Norte', que fue desarticulada luego de una larga investigación que contó hasta con la interceptación de al menos 50 líneas telefónicas, seguimientos controlados e información entregada por fuentes humanas.
En la operación capturaron a seis personas señaladas de ser responsables de hurtos, narcotráfico, homicidio agravado y porte ilegal de armas de fuego, entre los que está Jáuregui Pérez.
Desde esa fecha, este hombre estaba respondiendo en su casa por concierto para delinquir agravado.
“Él empezó a padecer tuberculosis y por eso fue cobijado con el beneficio de casa por cárcel, pero cuando empezaron a llegar las quejas de la comunidad se generó todo un operativo para descubrirlo”, dijo una fuente.
Rodolfo es hermano de José Edinson Jáuregui Pérez, alias Quemado, quien fue asesinado el 14 de diciembre de 2017.
“A ‘Quemado’ lo mataron recién salió de la cárcel, luego de pagar 18 meses por tráfico, fabricación o porte de estupefacientes”, añadió la fuente.
Otros allanamientos
Aunque la semana pasada la Sijín adelantó ocho allanamientos y capturó a cinco personas, solo Jáuregui Pérez fue enviado a la cárcel, el resto quedó en libertad por falta de pruebas.
De los otros capturados se conoció que están involucrados en un atraco que se presentó el 21 de diciembre de 2020, cuando despojaron de un arma de dotación a un guarda de seguridad, mientras se encontraba de servicio en un establecimiento de comercio.
En este hecho fueron capturados padre, madre e hijo, a quienes les encontraron un revólver calibre 32, siete cartuchos calibre 5.56 milímetros, seis balas 7.65 milímetros, dos cartuchos 9 milímetros y cuatro calibre 32, así como un celular reportado como robado para la misma fecha del hurto del arma de fuego.
Sin embargo, pese a las pruebas entregadas, los tres integrantes de la misma familia quedaron en libertad.