Los transportadores del estado Táchira aseguran que con la apertura de la frontera esperan reactivar la ruta directa desde San Cristóbal hasta el terminal terrestre de Cúcuta y una parada en el centro de la capital nortesantandereana, cuyo servicio sería la única manera de acabar con el 80% de actividad pirata que existe en esta región fronteriza de Venezuela.
Freddy Solano, presidente de la Cámara de Transportistas de la Frontera, dio a conocer que ya se encuentran gestionando los documentos ante las instancias gubernamentales de Colombia, en miras de volver a tener un punto de parada en Cúcuta, como lo tenían antes del año 2015, tras atravesar los puentes internacionales, sin embargo, expuso que del lado venezolano no han obtenido ningún tipo de manifestación ni plan en torno a este tema.
Al menos 12 empresas de transporte, con 2.000 unidades de la región, estaban autorizadas para realizar el tránsito a través del Puente Internacional Simón Bolívar, mediante permisos internacionales de circulación que exigía el Ministerio de Transporte de Colombia, así como los permisos en el puerto terrestre de Cúcuta.
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Los transportadores tienen optimismo en que la circulación del transporte se dé a través del Puente de Tienditas, lo cual generaría mayor fluidez a la hora del paso vehicular. Solano detalló que para transitar hacia Cúcuta las unidades de transporte deben tener seguros, que son costosos, por cuanto los vehículos piratas no tendrían la legalidad para realizar la ruta completa.
Taquilla en la Aduana de San Antonio
Para disminuir los niveles de servicio de transporte ilegal, alcaldes de San Cristóbal y San Antonio, junto a autoridades policiales de la entidad, propusieron la creación de una taquilla de revisión de boletería en el Puente Simón Bolívar, que tendrá como objetivo revisar que los boletos de pasajes extraurbanos sean de una línea legal, aunque no precisaron la fecha de instalación de dicho punto, solo mencionaron que arrancarán con la creación de una comisión para lograr el plan.
Sobre este punto, el representante de la Cámara de Transportistas de la Frontera consideró que dicha taquilla aumentaría los niveles de ilegalidad, en vista de que no existe confianza en los funcionarios venezolanos y creen que ese sistema también corre el riesgo de viciarse.
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Por el contrario, comunicó que lo que ven en positivo es la instalación de un canal en una de las calles cercanas al paso fronterizo, en donde las líneas organizadas puedan captar a los pasajeros, como ya lo tenían, puesto que en la actualidad se encuentra encerrado en el Terminal de San Antonio, mientras que los piratas operan libremente en las calles del municipio Bolívar.
El alcalde de San Cristóbal, Silfredo Zambrano, informó que todo boleto que sea adquirido por las personas en los diversos países deberá estar adscrito a un convenio bilateral con las líneas de transporte establecidas legamente en Venezuela, pasajes de empresas transportadoras que no suscriban dicho convenio, no será legal dentro de Venezuela. Además, los taxistas locales serán rotulados para identificarlos y evitar que realicen la función de los “Cinco Puestos”.
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Con relación a la reactivación de la ruta internacional, el burgomaestre de la capital tachirense dijo que es una decisión del Gobierno Nacional.
Las autoridades regionales también recibieron la inquietud que existe por partes de los transportadores por las demoras que les aplican en los puntos de control de los cuerpos de seguridad, por lo que aseguraron que tomarán medidas al respecto.
Zambrano dijo que hay líneas de transporte de Cúcuta que venden pasajes hasta en 100 dólares, sin ofrecer ninguna garantía de seguridad, cuando en realidad los costos de los pasajes son inferiores.
La alcaldesa del municipio Bolívar, Sandra Sánchez, indicó que el flujo de pasajeros en el terminal de San Antonio se han reducido en un 50% por causa de la piratería, incluso algunos pasajeros que compran boletos falsos solicitan apoyos a la alcaldía local, por ende, a ella le ha tocado asumir constantemente el hospedaje y traslado de las personas que son estafadas. Por ello, Sánchez comunicó que la figura de asesores de viajes ha sido controlada del lado venezolano.
La dinámica establecida por las autoridades municipales de San Antonio indica que las personas que llegan a la Aduana Principal tomen una ruta que los redirigirá al terminal local para luego avanzar al interior de Venezuela, no obstante, luego de la extenuante caminata, los usuarios prefieren acortar tiempo y distancias tomando rutas ilegales que les ofrecen sus servicios desde el Corregimiento La Parada.
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