Olas de calor, incendios... los récords de temperatura, aprobados o no por la Organización Meteorológica Mundial (OMM), ponen en peligro el planeta y nuestra salud. Entonces, ¿por qué certificarlos?
A continuación, cómo y por qué la agencia de la ONU con sede en Ginebra valida los registros de temperatura.
Meses de evaluación
Homologar un récord de calor generalmente toma varios meses.
Lea también: La mala hora que vive el cóndor andino
La OMM contacta primero con el servicio meteorológico del país concernido y con la organización específica que registró el supuesto récord para obtener los datos y los detalles de la ubicación exacta de la observación, el tipo de equipo empleado y las condiciones meteorológicas regionales.
Tras una primera evaluación de la Comisión de Climatología de la OMM y del Relator de la OMM para el Tiempo y los Extremos Climáticos, Randall Cerveny, del valor medido y la información que lo acompañan, un comité de científicos atmosféricos revisa los datos.
Luego se da una sentencia definitiva. Hasta ahora "ninguna de las conclusiones del comité ha sido anulada", dice a la AFP Cerveny.
Un registro que data 2007
Tras escuchar a periodistas decir que Katrina -que inundó Nueva Orleans y dejó 1.800 muertos- era "el peor huracán de todos los tiempos", Cerveny, que sabía que 1970 un ciclón mató al menos 300.000 personas en una región del hoy Bangladesh, publicó un documento científico (2006) en el que pedía la creación de una base de datos mundial y oficial de récords.
La OMM le pidió entonces a Cerveny, científico atmosférico y profesor de geografía en la Universidad Estatal de Arizona, que creara en 2007 una base de datos que mantiene registros mundiales, hemisféricos y regionales de una serie de condiciones meteorológicas extremas (temperatura, precipitaciones, ráfagas de viento, altura de las olas, duración de los rayos, etc.) y el número de muertes relacionadas con esos fenómenos.