Hace dos semanas, cientos de organizaciones feministas, ciudadanos y organismos religiosos quedaron con los crespos hechos luego de que la Corte Constitucional aplazó la discusión sobre la posibilidad de despenalizar el aborto en Colombia.
Lo anterior, luego de que, tras una recusación, el magistrado Alejandro Linares presentara a la Sala Plena un impedimento para apartarse de la votación central, lo que se ha convertido en el revés para que la determinación sobre este importante tema todavía no se tome.
El impedimento en cuestión, se presentó tras la recusación que realizó la abogada Ana María Idárraga, quien aseguró que Linares, en el marco de dos entrevistas con medios de comunicación, en marzo de 2020 y noviembre de 2021, compartió entrelíneas su opinión sobre la interrupción voluntaria del embarazo.
Aunque el magistrado no manifestó su opinión concreta, consideró que no es secreto para la opinión pública su pensamiento, pro-aborto, además porque ha votado a favor de la despenalización en ocasiones anteriores.
Como la Corte no logró llegar a un consenso y la votación quedó 4-4, se llamó al conjuez Hernando Yepes Archila para que definiera si aceptaba o no el impedimento de Linares, lo que se supone que debería haberse definido este miércoles 1 de diciembre.