Cuando apenas se analizaban los resultados de la edición 46 de la Cumbre de Davos (Suiza), con la participación de gobernantes y empresarios de todo el mundo, se anunciaba la instalación en Quito de la cuarta Cumbre de la CELAC, Comunidad de Estados Latinos y Caribeños.
La CELAC es un organismo intergubernamental de ámbito regional fundado el 23 de febrero de 2010 en Playa del Carmen, México, y ratificado a principios de diciembre de 2011 en Caracas. La primera Cumbre se celebró en Santiago de Chile en 2013, la segunda en La Habana a finales de enero de 2014 y la tercera en Costa Rica en 2015. La próxima edición tendrá lugar en Santo Domingo, República Dominicana en 2017. Esta organización regional la integran 33 países de América Latina y el Caribe, superando en su integración a la Comunidad de la Unión Europea (28 países).
Al igual que Chávez lo hacía en sus intervenciones, Correa, Morales y Maduro, siempre resaltan que en este bloque no hay injerencia de Estados Unidos y Canadá. Además, consideran que la CELAC es el posible reemplazo de la Organización de Estados Americanos (OEA).
El proceso de paz en Colombia y la pobreza en América Latina estaban como los principales temas de estudio en esta oportunidad, por esto, el presidente Rafael Correa inició el discurso de instalación con esta introducción “La paz debe ser presencia de justicia, dignidad y oportunidades para todos”. El apoyo fue unánime para el alcance de la paz en nuestro país, razón por la cual el presidente Juan Manuel Santos respondió “La CELAC está en capacidad de seguir contribuyendo a la paz de Colombia y de toda la región”.
La participación de países en los que el petróleo representa un alto porcentaje de sus exportaciones, como Venezuela, Brasil, Ecuador y Colombia, hizo que gran parte de los debates se enfocaran a hacer énfasis en que la baja del precio del crudo no solo perjudica a los países exportadores, pues en el largo plazo perjudica a todo el planeta.
Aunque no estaba en la agenda como tema principal, el zika se tornó en protagonista tras la intervención de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff. Según cifras dadas a conocer por la mandataria, el número de bebés con microcefalia en el país carioca llega a 270, mientras los casos sospechosos ascienden a la preocupante cifra de 4.180. Por esto, Dilma llamó a reunión a ministros de salud del bloque y se mostró confiada en la producción de una vacuna.
Los 33 países acordaron seguir trabajando por consolidar una región con cero pobreza e igualdad social, igualmente pidieron poner fin al bloqueo económico que mantiene EU contra Cuba desde hace más de 50 años.