Ni soy gobiernista, ni izquierdista, más bien independientongo, pero he votado más por los oficialistas.
De hecho, vote en las pasadas por el actual presidente Juan Manuel Santos.
Mi voto mal que bien ha sido a conciencia. Por ejemplo, no vote en ningún momento por el señor Uribe Vélez.
Hago esta reflexión para indicar que en todo momento me asiste la autoridad moral para defender o criticar con independencia los actos de gobierno tanto locales como nacionales y no voy a cambiar de postura a estas alturas de mi vida.
El gobierno nacional en concubinato con la Asociación Bancaria y de Entidades Financieras de Colombia (Asobancaria) difundido por Colprensa, “lanzaron la iniciativa denominada “Proyecto F” para contribuir con la reducción del uso del efectivo en Colombia”.
El argumento o más bien el pretexto de los susodichos, es que el uso de efectivo favorece la evasión de impuestos por cuanto los humildes contribuyentes no lo declaran como lo manifestó el Ministro de Hacienda Mauricio Cárdenas que “usar mucho efectivo es malo, tiene muchos inconvenientes.
Uno de ellos es que lo que paga en efectivo no se declara, eso explica por qué en Colombia tenemos tasas de evasión tan altas”.
Y Uds. amables lectores se estarán preguntando ¿qué papel juega la Asobancaria apoyando al gobierno en el diseño de sus políticas tributarias como estas del control a la evasión de impuestos? ¿Será que de un momento a otro les entró dolor de patria? ¿O altruistamente, desinteresadamente, resuelven colaborar para que el gobierno recaude más impuestos?
¿O sus directivos son muy buenas personas ? ¡Ninguna de las anteriores!
La Asociación Bancaria como lobos hambrientos están a la caza de mayores utilidades para sus asociados, los ricos del país.
Si la iniciativa prospera, como ellos lo creen (el concubinato), todo se va manejar con dinero plástico, por intermedio de las entidades financieras, que por todo cobran.
Las nóminas de los más humildes empleados, todo pago se exigirá que sea electrónico.
En fin, lo que buscan el gobierno y la Asobancaria es fortalecer aún más las entidades bancarias.
Que no quede títere con cabeza, perdón, que no quede colombiano sin tener una cuenta bancaria.
Eso representa pago por manejo de cuenta, por consultas, por retiros, por consignaciones para otras plazas, por talonarios, el cuatro por mil, cuota de manejo, uso de cajero, tarjeta débito, certificaciones, extractos, constancias, etc. etc.
Me llamó la atención una caricatura de “Matador” en facebook que dice: “Abrí mi cuenta bancaria con $20.000, menos $7.000 de cuota de manejo, menos $6.500 por uso de cajero, menos $3.000 por consulta de saldo, menos $12.000 de la tarjeta débito, ahora le debo al banco $8.500.
Nos piensan meter descaradamente la mano al bolsillo a todos los colombianos.
Así las cosas, ¿quién podrá defendernos?