José Duván Medina es un hombre que supera los 60 años, de cabello canoso y gruesas manos, quien demuestra el arduo trabajo que ha tenido que hacer a lo largo de su vida.
Nacido en Sardinata, Norte de Santander, Medina contó que por años tuvo que vivir ‘arrimado’ en la vivienda de sus familiares, porque las oportunidades que tenía para un sustento económico eran escasas.
“Yo me la pasaba en la casa de mi hermana, a veces iba para donde otro familiar, y así tenía que hacer para vivir. Era difícil, porque no tenía para pagar un arriendo”, comentó José Duván.
Sin embargo, estar en el lugar correcto, en el momento preciso, le abrió las puertas a una nueva vida, en el lugar que menos se imaginaba.
El humilde hombre aseguró que un día estaba el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE) haciendo el censo en su pueblo natal, en ese momento, se encontraba en casa de su hermana y él les comentó su condición.
Medina no le dio mucha relevancia al asunto y siguió su vida, hasta que un día recibió la llamada que más alegría le ha dado.
“Me dijeron: José Duván Medina, le vamos a dar un apartamento gratuito en Ciudad Rodeo, en Cúcuta, solo debe presentar la cédula y la única condición es que la vivienda no puede ser vendida hasta dentro de diez años”, señaló Medina.
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El hombre, como pudo, alistó sus pertenencias, tomó el poco dinero que tenía, pagó un ‘pirata’, y llegó al lugar donde recibió su apartamento, pequeño, pero con tres habitaciones, cocina, baño, uno que otro sitio de esparcimiento y lo suficiente para hacer que su rostro esbozara una sonrisa nostálgica.
Medina, al ser conocido por todos los residentes del lugar por su popular venta de tintos y dulces, fue elegido hace poco como presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC).
Así como José Duván, muchos nortesantandereanos llegaron a ocupar los más de mil apartamentos, distribuidos en 17 torres, del conjunto residencial Ciudad Rodeo, ubicado a un costado del Anillo Vial Occidental.
En la actualidad, este lugar necesita más atención por parte de la administración municipal, pues una gran cantidad de los residentes son población vulnerable que ha sido golpeada de frente por los horrores de la guerra y se refugiaron en garantías de no repetición.
Migrantes venezolanos también encontraron allí una segunda oportunidad de vida.