Después de 9 meses de competencia, el Cúcuta Deportivo terminó este sábado su participación en la Supercopa Juvenil de la Federación Colombiana de Fútbol logrando un destacado subcampeonato al caer en la final ante Envigado con un global de 3-0.
En su camino superó a rivales como Atlético Bucaramanga, Alianza Petrolera, La Equidad y Millonarios FC. Disputó 26 partidos, ganando 16, empatando en 5 y perdiendo en 5.
El plantel rojinegro se caracterizó por ser un grupo diverso con jugadores de cinco departamentos de Colombia, prevaleciendo los talentos de Norte de Santander.
Inicialmente el motilón comenzó trabajos en Medellín bajo las órdenes de Aquivaldo Mosquera –entrenador del plantel profesional en el regreso- y su asistente Giovanny Ruiz, primer técnico
Allí se organizó un grueso número de jugadores, en su mayoría antioqueños. De esa camada surgió el capitán Jhon Bayron Suaza, quien acumuló 10 partidos en el profesionalismo y tres anotaciones.
Asimismo pudo mezclar a unos cucuteños que fueron seleccionados por Carlos Eduardo Hernández en una convocatoria hecha en el estadio General Santander.