La tormenta que desató la caída del precio internacional del petróleo, por exceso de oferta, puso al Gobierno a hacer cuentas por los menores ingresos que se verán reflejados en las regalías y en las utilidades de Ecopetrol, de la que es accionista.
En el primer caso, los ingresos por la explotación de los recursos naturales no renovables que hace la empresa privada fluirán en menor cantidad y afectará la partida de inversión que distribuye la nación a través del Sistema General de Regalías (SGR).
Se estima que los ingresos fiscales del país y las regiones podrían caer más del 75 por ciento si el precio del barril se mantiene por debajo de los 25 dólares para la referencia Brent, de acuerdo con los cálculos de la Asociación Colombiana de Petróleo (ACP).
El gremio afirma que esta situación implica una reducción de cien mil barriles diarios en la producción nacional y, por ende, en el recaudo por regalías, impuestos y derechos económicos pasaría de 16 billones de pesos en 2019 a 4 billones de pesos en 2020.
Según la ACP, el costo de producir un barril de petróleo en Colombia está entre 40 y 45 dólares el barril, por lo que un precio de crudo por debajo de ese punto de equilibrio apenas sirve para cubrir las obligaciones actuales en la fase de producción.
Un estudio de la Dirección Nacional de Planeación (DNP) sobre el aporte de las regalías al crecimiento económico del país revela que la ejecución de proyectos con estos recursos suma un punto al producto interno bruto y genera 193.000 empleos.
El año pasado, el Estado transfirió 41 billones de pesos a las entidades territoriales para educación, salud, agua potable, alimentación escolar, propósito general (libre destinación), resguardos indígenas, ribereños y asignaciones especiales al Fonpet.
La mayoría de los recursos se destinaron a educación y salud, con 34 billones de pesos, que representa el 83 por ciento de las regalías distribuidas en 2019, según los datos del Sistema de información y consulta de distribuciones de recursos territoriales (Sicodis).
Norte de Santander recibió 1,4 billones de pesos en 2019. El 86 por ciento de las regalías fueron para inversión en educación y salud, es decir, 1,2 billones de pesos. De la transferencia total para el departamento, Cúcuta percibió 534.161 millones de pesos.
Impuestos pesan más
Luis Carlos Reyes, director del Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana, señala que, si bien es cierto que el desplome de los precios del petróleo tiene un impacto en la economía, el crudo no es la única fuente de ingreso del país ni la que más pesa.
El experto explica que la mayor parte de los ingresos de la nación provienen de los impuestos que recauda la Dirección Nacional de Impuestos Nacionales (DIAN), que el año pasado sumaron 158 billones de pesos y crecieron 9 por ciento frente a 2018.
“En la medida que bajen los ingresos, el Estado va a tener menos dinero para invertir en proyectos (de educación, salud) que sí afectan al ciudadano de a pie, pero no de una manera desproporcionada porque el petróleo no es la única fuente”, asegura Reyes.
El docente e investigador advierte que a la crisis del petróleo se le suma la devaluación del peso frente al dólar, sobre todo, en el pago de la deuda externa. Si el precio del petróleo baja, el país recibe menos divisas y la moneda estadounidense se encarece.
En ese sentido, el hueco fiscal que dejó la reforma tributaria, al recortar los impuestos de las empresas (9 billones de pesos), se ahondará por menos ingresos, un dólar más caro y la recesión propiciada por la COVID-19, que ya superó los cuatro mil contagiados en Colombia.
“El Ministerio de Hacienda abrió un hueco fiscal y lo que está haciendo la pandemia y los precios del petróleo es ahondar más ese hueco fiscal (…) a la luz de estos acontecimientos, la reforma tributaria es aún más contraproducente de lo que uno hubiera imaginado”, afirma Reyes.
El director del Observatorio Fiscal propone dos salidas para hacer frente a la actual coyuntura y obtener recursos. La primera tiene que ver con endeudarse para financiar una serie de programas de apoyo para los trabajadores, como subsidiar nóminas.
“Una vez se acabe la emergencia sanitaria, hay que pagar esa deuda con una reforma tributaria que sea progresiva, donde las empresas o personas más prósperas del país paguen un porcentaje mayor que el ciudadano de a pie”, dice el docente.
Según las cuentas del Observatorio Fiscal, se requeriría de una deuda entre 20 y 30 billones de pesos para los planes de protección al empleo. Una forma es acudir a los organismos internacionales y la otra, en caso extremo, al Banco de la República.
“El Emisor no tiene restricción de cuánto necesita para comprar deuda, imprime plata si es necesario, pero es una operación muy delicada. Los países que acuden a esta herramienta de manera irresponsable se enfrentan a alta inflación, caso Venezuela”.
Reyes aclara que los académicos se refieren a esta medida, no están proponiendo nada por el estilo, sino que, en una serie de circunstancias, muy bien delimitada, de emergencia, como la que se está viviendo, este mecanismo se podría usar de manera temporal.
Un día de cuarentena
Colombia genera 1.000 billones de pesos al año. Si todas las actividades económicas cesarán por un día, el costo sería de 3 billones de pesos.
Algunos académicos estiman que el 10 por ciento de las actividades están paralizadas por la cuarentena, por lo que el costo diario sería de 300.000 millones de pesos.
“Puede ser mucho más. No solo por el efecto de parar una actividad económica, sino que las personas que la ejercían dejan de demandar bienes producidos por otras personas que no iban a parar por la cuarentena”, dice Reyes.
Fedesarollo estima que el producto interno bruto caerá 2,7 por ciento en el mejor escenario y 7,9 por ciento en el peor de todos.
Este resultado obedecería a un menor ritmo de la actividad económica y a una reducción en el consumo de los hogares por el aislamiento.
¡A reducir los costos!
La Opinión consultó a Ecopetrol para conocer el impacto de los precios del petróleo en su operación y las expectativas que tiene en el actual contexto, por la sobreoferta y la baja demanda generada por la propagación del coronavirus.
¿Cómo se afectan las operaciones de la compañía?
Estamos viviendo una crisis sin precedentes que cambió para siempre nuestra forma de vivir, nos afectó a todos y modificó las bases de la industria petrolera mundial.
A la sobreoferta de crudo en el mercado se sumó el dramático descenso en la demanda por la menor actividad económica y el confinamiento por la COVID-19, que llevó los precios a niveles muy bajos, a pesar del acuerdo anunciado por la OPEP y otros países.
Debido al descenso en la demanda interna de combustibles originada en el aislamiento obligatorio preventivo, las refinerías se encuentran operando con cerca de la mitad de su capacidad y con condiciones extremas de desinfección y aislamiento para proteger la salud de los trabajadores.
En Barrancabermeja, por ejemplo, se está operando con cerca del 15 por ciento del personal que normalmente labora en las instalaciones. Solo están activas 8 de las 52 plantas principales.
¿Cuál era la meta de producción?
En el 2020 hay una meta de producir entre 745.000 y 760.000 barriles de petróleo por día, pero, dada la actual coyuntura, cada día se hace un análisis detallado sobre la rentabilidad y los márgenes de cada uno de los activos para tomar decisiones informadas, teniendo en cuenta escenarios de precios conservadores.
La mayoría de los campos de Ecopetrol son rentables a los precios del Brent observados en promedio en los últimos días. Algunos pozos individuales pueden no serlo en un momento específico de gran caída del precio internacional, pero no los campos completos ni mucho menos los más representativos de nuestra producción.
¿Cuánto cuesta producir un barril de petróleo?
Al cierre del 2019, el costo de levantamiento de un barril de petróleo para Ecopetrol fue de 8,56 dólares.
En estas condiciones, ¿se va a seguir produciendo?
Ecopetrol es consciente de que se deben que hacer esfuerzos adicionales para bajar todavía más los costos y lograr que la mayor parte de la producción sea rentable en escenarios tan retadores como los de hoy.
La mayoría de los campos de Ecopetrol son rentables a los precios del Brent observados en promedio en los últimos días.
Algunos pozos individuales pueden no serlo en un momento específico de gran caída del precio internacional, pero no los campos completos ni mucho menos los más representativos de nuestra producción.
¿Cómo se va a minimizar el impacto en la caja y el empleo?
Debido a la situación de precios, Ecopetrol no ha despedido a ningún trabajador directo. La empresa puso en marcha un plan de ajuste financiero que comprende cuatro frentes: reducción de costos y gastos, recorte de inversiones para el 2020, financiamiento para proteger la caja y una agresiva gestión comercial para asegurar un mejor precio para los crudos y productos.
En materia de gastos y costos, ya se superó la meta de 2 billones de pesos que se había fijado en una primera fase del programa y a este momento los ahorros ascienden a 2,2 billones de pesos. No obstante, se continúan buscando más ahorros y eficiencias.
El plan de inversiones 2020 fue recortado en 1.200 millones de dólares y se ubicó en un nuevo rango entre 3.300 y 4.300 millones de dólares.
A la fecha también se superó esa meta y el recorte asciende a 1.300 millones de pesos y se siguen evaluando los escenarios para definir si son necesarios ajustes adicionales.