El Gobierno garantizó la operación de la actividad minera, indispensable para la producción de energía, combustibles y el flujo de regalías.
El gobernador y los alcaldes de Norte de Santander que reciben asignaciones directas de regalías están autorizados para aprobar proyectos de inversión necesarios en la atención de la emergencia sanitaria desatada por la pandemia del nuevo coronavirus.
La caja disponible del Sistema General de Regalías asciende a 4,5 billones de pesos para ese fin y el departamento tiene asignado 112.000 millones de pesos. Los proyectos no necesitarán pasar por los Órganos Colegiados de Administración y Decisión (OCAD).
Estos recursos, que son objeto de fiscalización, servirán para fortalecer el sistema de salud, ofrecer apoyo a la población vulnerable, garantizar la continuidad en la prestación de servicios públicos, asumir el costo de alumbrado público e impulsar el desarrollo rural.
La viceministra de Minas, Carolina Rojas Hayes, señaló que el sector minero-energético fue uno de los priorizados por el Gobierno Nacional para que continuara su operación y no se viera tan afectado por la declaratoria de emergencia sanitaria de la COVID-19.
Explicó que la continuidad de la cadena minero-energética es clave para los servicios públicos (energía y gas), la producción de combustibles vitales para el transporte de alimentos y el flujo de regalías indispensables para contrarrestar la pandemia.
Los ministerios de Minas, Salud y Trabajo emitieron una circular conjunta para que las empresas del sector minero adopten buenas prácticas sanitarias, de seguridad y salud en el trabajo, con el fin de proteger a los empleados de la cadena logística y productiva del sector.
Rojas recordó que la seguridad minera es una responsabilidad contractual de los titulares mineros, no solo durante la pandemia, sino siempre, para evitar siniestros como el ocurrido en San Cayetano, cuando seis mineros murieron por una explosión.
“En estas circunstancias, en particular, los titulares mineros deben redoblar sus esfuerzos y sus obligaciones contractuales, cumplir con todos requisitos de ley, para minimizar los riesgos y garantizar la seguridad minera”, expresó la viceministra.
Sobre la actividad minera en Norte de Santander, la funcionara informó que no se está operando al cien por ciento por los protocolos de prevención y que en algunos municipios no es posible la labor por el temor de las comunidades a contraer la COVID-19.
“El Ministerio de Minas emitió la circular conjunta (número 1 del 6 de abril de 2020) para darle una referencia a las autoridades locales y las comunidades, bajo qué condiciones deben desarrollarse las actividades mineras”, afirmó Rojas.
Óscar Mauricio Ortega, presidente de la junta directiva de la Asociación de carboneros de Norte de Santander (Asocarbonor), informó que, a pesar de que el sector tiene excepciones, han tenido dificultades para desarrollar su actividad en algunos municipios.
En Salazar de las Palmas, en el occidente del departamento, afirma que los mineros trabajan a media marcha porque la alcaldía de ese municipio expidió una resolución que restringe la circulación de vehículos con carga día por medio.
Algo similar ocurre en Sardinata, “donde algunas juntas de acción comunal no han permitido el paso de los trabajadores ni de los vehículos con carga”. Este municipio aporta el 26 por ciento del total regional, con 451.766 toneladas de carbón en 2019.
La Secretaría de Minas de Norte de Santander informó que en Sardinata siguen las restricciones por parte de la comunidad en tres sectores: Cerro La Vieja (atravesaron un árbol), El Sordo (bloqueo con árbol) y La Florida (paso cerrado con alambres de púas).
Olger López, jefe de ese despacho, recordó que la actividad minera está permitida (Decreto 531, articulo 3, literales 28 y 33) y que mañana se reunirá con los líderes de las comunidades para levantar el cierre de manera concertada.
Norte de Santander produjo 1,7 millones de toneladas de carbón en 2019 y registró una caída de 32 por ciento. En 2018, el acumulado fue de 2,5 millones de toneladas, según datos del Ministerio de Minas y la Unidad de Planeación Minero Energética (Upme).
En materia de regalías, el departamento generó $1,5 billones en regalías entre 2012 y 2020. El 86 por ciento proviene de la explotación de hidrocarburos.