Sin reforma tributaria, este es el camino de Gustavo Petro
El presidente indicó que la decisión de archivar el proyecto de Ley de Financiamiento “es un golpe al pueblo” y se refirió a la “sopa de Carrasquilla” y al cuadro político pro Gobierno. Dos expertos analizan el panorama.
Como era de esperarse, fue bastantea aireada la reacción del presidente Gustavo Petro a la decisión en el Congreso de hundir el proyecto de Ley de Financiamiento, pues, afirmó que se le dio “un golpe al pueblo colombiano”.
La impotencia del jefe de Estado es porque el Presupuesto General de la Nación (PGN) de 2025 quedó desfinanciado, pues, con esa reforma tributaria pretendía recaudar $9,8 billones adicionales, aunque en un principio la meta fue de $12 billones.
De acuerdo con el director del Observatorio Fiscal de la Pontificia Universidad Javeriana, Mauricio Salazar, tras la decisión de las Comisiones Económicas del Senado y Cámara de Representantes de archivar el proyecto de la Ley de Financiamiento, el Gobierno “tendrá que ajustar mucho más el gasto público el próximo año”.
“Esto nos deja un presupuesto para 2025 de $511 billones, de los cuales sólo $70 billones corresponden a la inversión pública, lo que implicaría un castigo a este rubro con la reducción del 26% en términos reales, en comparación con el presupuesto de este año”, afirmó Salazar.
El economista sostuvo que, ante esta situación, desde el Observatorio alertan que el Ejecutivo tiene el reto de hacer los recortes sin afectar los programas sociales vigentes y los recursos para las nuevas necesidades que surjan.
El experto Henry Amorocho Moreno, profesor de Hacienda Pública, Tributación y Presupuesto de la Universidad del Rosario, recordó que Petro ya no cuenta con un PGN de $523 billones, que es el monto del proyecto para 2025.
“Entonces, el Gobierno va a expedir la Ley de Presupuesto vía decreto - de $523 billones -, pero, el 1 de enero, hará un aplazamiento de apropiaciones y dejará el monto en $511 billones”, afirmó Amorocho.
El académico considera que el decreto presidencial del PNG debería ser directamente por $511 billones y luego reducir apropiaciones por los $12 billones que contempló la proyecto de Ley de Financiamiento, radicado el 10 de septiembre y no el monto del texto del 9 de diciembre.
El experto en Hacienda Pública, Tributación y Presupuesto aseguró que la administración de Gustavo Petro ha tenido un comportamiento de recortes de 60% en gastos de funcionamiento y 40% en inversión, por lo que cree que podría seguir esta tendencia ante ese panorama y tendrá hasta el 31 de diciembre para ajustar el decreto de Presupuesto General de la Nación para la vigencia fiscal de 2025.
Las prioridades de Petro
El presidente Gustavo Petro expresó que la mayoría de la clase política tradicional de Colombia, en las Comisiones Económicas, decidió “darle un golpe profundo a la economía y al pueblo”.
“Casi los mismos que aprobaron ponerle el impuesto a la sopa de Carrasquilla decidieron no bajarle los impuestos a todas las empresas y a la clase media, para proteger los grandes pulpos, unas multinacionales de combustibles fósiles y a los empresarios oscuros de los juegos de suerte y azar en línea”, manifestó el mandatario.
Petro recalcó que “la crisis presupuestal no la pagará el pueblo” y que el recorte no se hará sobre los programas centrales, “que ya han sacado millones de personas de la pobreza y el hambre”.
“Haré cambios en la esferas tributarias. La lucha contra la elusión tributaria, comenzando por los juegos de suerte y azar en línea y el contrabando, debe ser la prioridad. El recorte presupuestal hacia las regiones debe ser contrario a ampliar las brechas territoriales. La ausencia de una reforma laboral debe ser compensada por el salario mínimo. La política de crédito a la producción en el sector público debe priorizar el crédito asociativo a la economía popular”, detalló.
El presidente habló también de comenzar la negociación de la transición de las grandes concesiones carboneras hacia su salida y su propia reconversión, así como duplicar el turismo internacional, que “se ha convertido en un gran generador económico de la transición hacia la descarbonización”.
Igualmente, se refirió a la necesidad de expedir de emergencia la solución a miles de proyectos de energías limpias represados y que el cambio de la fórmula debe hacerse en función de bajar sustancialmente las tarifas de electricidad y “sin trampas”.
Finalmente, Petro aseguró que la organización popular debe pasar a ser la gran contratista del Estado y que el cuadro político de las fuerzas gubernamentales se readecuará, de acuerdo con el comportamiento de dichas fuerzas en la votación por la Ley de Financiamiento.