Hoy domingo, 16 de junio, llega el estreno de una de las sagas de televisión más esperadas: House of the Dragon. La serie ronda por la aventura, la fantasía y lo épico, lo que se combina con un realismo y suspenso. Además, se basa en el libro Fuego y Sangre de George R.R. Martin, el cual está ambientado 200 años antes de los eventos de Game of Thrones, producto estrella de la plataforma MAX. La temporada contará con 10 episodios, y seguirá siendo protagonizada por Emma D’Arcy, Matt Smith, Olivia Cooke, entre otros, en lo que será el desarrollo de la guerra entre los Targaryen.
Bloomberg reveló que HBO anunció la tercera temporada sin aún estrenar la segunda. Lo anterior se puede deber a que “la serie ha marcado hitos en cifras y recaudo, así como lo dejó ver desde su primera temporada. House of the Dragon tuvo más de nueve millones de espectadores”, dijo a La República Alejandro Matallana, guionista de cine y profesor en la Universidad Jorge Tadeo Lozano.
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Y agregó que además no es solo las visualizaciones, sino también todos los subproductos qué la convierten prácticamente en una industria, con todo el tema del merchandising”. Y es que los 10 episodios de la primera temporada tuvieron un costo de US$200 millones; asimismo, HBO realizó un gasto de aproximadamente US$100 millones para sacar adelante la campaña de marketing de la primera temporada.
Lo anterior tuvo como consecuencia que House of the Dragon se convirtiera en uno de los esfuerzos de mercadeo y publicidad más grandes de HBO hasta la fecha. Por otro lado, los costes de producción y la campaña de mercadeo no fueron los únicos gastos que tuvo la franquicia, ya que, el pago del elenco en la primera temporada se ubicó entre los US$100 y US$300 millones.
“HBO hace estas inversiones porque este tipo de series son importantes para ellos porque busca replicar el éxito, al menos parcial, de Game of Thrones, atrayendo a una audiencia fiel con la oferta de nuevas historias del mismo universo narrativo”, afirmó el abogado en derecho del entretenimiento, Ómar Javier Umaña.
Sin embargo, para estas nuevas temporadas, HBO no la tiene fácil, ya que, House of the Dragon tiene el desafío de mantener la calidad y la atención de una audiencia bastante crítica, que también se acostumbró a la serie antecesora que los hizo sorprenderse en muchas ocasiones, agregó Umaña.
Esto puede deberse a que las cifras de audiencia hablan por sí solas. Game of Thrones alcanzó 9,3 millones de espectadores en su primera temporada en su estreno; y estos números no hicieron más que crecer de manera consecutiva hasta el estreno de la última, la cual terminó con una audiencia de 46 millones de personas, señala el portal Dexerto.com. Su episodio seis de la última temporada, la ocho, fue el más visto en toda la historia de la plataforma.
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Por su parte, House of the Dragon se estrenó con 9,9 millones de espectadores, solo en un episodio, pues Max ya tenía cosechado una audiencia para ese tipo de filmes. Solo en Estados Unidos consiguió 29 millones de vistas, lo que representó un récord para HBO. Igualmente, se estima que la audiencia sea de 65 a 70 millones a nivel global. Sin embargo, su episodio más visto, el dos, tuvo 9,1 millones de reproducciones menos que Game of Thrones.
“Definitivamente, toda la franquicia de Game of Thrones ha colocado la vara muy alta para la industria de la televisión en cuanto a historia, actuaciones y producción en general. Indudablemente estas mega producciones obligan a otros canales o plataformas a buscar producciones cada vez más grandes, como es el caso de la serie de Harry Potter de Max”, mencionó Matallana.
Sobre a qué se debe el éxito de ambas, el guionista explica a que tienen elementos fuera de lo común en su ambientación.
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