Querer satisfacer a su pareja a través de un video íntimo, se convirtió en la peor pesadilla y vergüenza para *Alicia Delgado, de 30 años, una reconocida empresaria que fue una víctima más de la divulgación ilegal de este material en las redes sociales.
La depresión y la desesperación invadieron a la mujer, que no entendía en qué momento pasó a ser motivo de burla y morbo de las personas a su alrededor y de todo el que la reconocía en las calles de la ciudad.
Casi pierde su trabajo por el miedo a salir de casa. Su entorno familiar se afectó por el encierro al que se sometió después de conocer que su video estaba circulando en todas las redes, con infinidad de comentarios en su contra.
Aunque era consciente de que envió el video que ella misma grabó, no se explicaba cómo llegó a manos de personas ajenas y todo terminó en la tragedia que estaba viviendo.
A su compañero sentimental le robaron el teléfono celular en el que tenía la grabación y, días después del robo, las imágenes de su novia ya estaban circulando en internet.
Según un investigador de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín), de la Unidad de Delitos Informáticos, este caso es tipificado con los delitos de acceso abusivo a un sistema informático y a la violación de datos personales, además de la violación al derecho a la intimidad, contemplado en la Constitución Política de Colombia.
Las personas que estén involucradas en estos delitos son sancionadas bajo la Ley 1273, de 2009, de Protección de Información y datos.
Según la norma, “el que sin estar facultado para ello, en provecho propio o de un tercero, obtenga, compile, sustraiga, ofrezca, venda, intercambie, envíe, compre, intercepte, divulgue, modifique, o emplee códigos personales, datos personales, contenidos en ficheros, archivos, base de datos o medios semejantes, incurrirá en prisión de 48 a 96 meses y, deberá pagar una multa de 100 a 1.000 salarios mínimos legales mensuales vigentes”.
El investigador resalta que existen otras dos modalidades en este tipo de delitos.
Una, en la que la víctima conoce a otra persona por internet y luego de que se gana su confianza, hay un intercambio de fotos y videos. Sin embargo, cuando envía los videos íntimos, es blanco de extorsiones y de amenazas, con tal de que siga produciendo este tipo de material fílmico.
“Ahí lo que pasa es que la otra persona, que normalmente es de otro país, le ha prometido cosas y dinero para que la víctima acceda a enviar los videos. Cuando la extorsiona le pide a cambio esas mismas cosas para no divulgar las imágenes”, explicó.
La otra modalidad es conocida como grooming, que finalmente es utilizada para hacer pornografía infantil. En esta, personas adultas que se hacen pasar por menores de edad, se ganan la confianza de los niños y logran que estos les envíen material pornográfico.
“Se hacen pasar por niñas, se ganan la confianza de la víctima, le piden fotos y videos y la niña se deja. Cuando se enteran, la chantajean con la excusa de que busquen más niñas que hagan eso para evitar que les envíen los videos a sus papás”, dijo el investigador de la Sijín.
¿Qué hacer cuando sea víctima?
Lo primero que hay que tener en cuenta cuando se es víctima de la divulgación de fotos y videos sexuales en las redes sociales, es identificar en qué sitios está circulando este material.
Seguido, se deben tomar impresiones en pantallas, o ‘pantallazos’ del video, ubicar fechas y horas, y los usuarios que lo comparten.
Como medida de prevención, se puede denunciar en las redes sociales el contenido para que se bloquee.
Después de seguir estos pasos, se debe denunciar ante el grupo de delitos informáticos de la Sijín.
Allí, a través de correos institucionales, la Sijín envía las solicitudes de bloqueo a los contactos directos de las redes como Facebook, Twitter o Youtube, entre otras.
Además, se inician las investigaciones para determinar el origen de la divulgación del contenido y así, poder concretar las sanciones judiciales al responsable.
En cifras
El grupo de delitos informáticos de la Sijín adelanta al menos 10 procesos investigativos entre 2014 y lo que va de 2015 de acceso abusivo a un sistema informático y violación de datos personales.
Sin embargo, en lo corrido de este año se han investigado 20 casos de pornografía infantil.
Estas situaciones en la que están involucrados los niños se reflejan con más frecuencia en los colegios. Por esto la Policía adelanta programas preventivos en las instituciones educativas con el fin de concienciar a los estudiantes de los delitos en los que se involucran por esta modalidad.
Las autoridades recomiendan a los padres que estén pendientes de los sitios que sus hijos visitan en internet y de las personas con las que chatean, para evitar que sean víctimas de este fenómeno.