En la mirada de la madre de Yeferson Johan Rojas Sánchez, ‘Iguano’, había tristeza y dolor, ella no sabe qué llevó a que a su ‘niño’ lo asesinaran a balazos, la noche del pasado jueves.
“Él era consumidor de drogas, pero eso no significaba que fuera mala persona. Él prefería reciclar o pedir monedas antes que robar en una casa y atracar. La vida se la arrebataron de una manera tan denigrante”, indicó la mujer en medio de las lágrimas.
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La última vez que ella lo vio con vida fue el jueves en la mañana, cuando ‘Iguano’, de 25 años, llegó hasta la humilde vivienda del barrio Rosal del Norte, tocó a la puerta y ella le abrió. Enseguida, le sirvió el desayuno y mientras comía le rogó que no siguiera en esa vida y se pusiera a trabajar en lo que fuera.
En esos momentos el corazón de la madre le advertía que algo malo iba a suceder. Efectivamente a las 9:40 de la noche el hombre fue asesinado de un disparo en la cabeza, mientras se encontraba en una calle angosta de la calle 4 con avenida 12, en el barrio María Paz, un sector cercano a Rosal del Norte.
Así recibieron la noticia
Un hombre, que iba en una moto, llegó hasta la casa y tocó la puerta en varias oportunidades, la mamá abrió y recibió como ‘un baldado de agua fría’ la noticia.
Ella se puso unos zapatos y cogió el registro civil de él y se fue con el hombre en la moto hasta la escena del crimen. Al llegar ya había varios policías e integrantes la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho), quienes le preguntaron si él tenía enemigos o había sido amenazado, pero ella aseguró desconocer cualquier situación al respecto.
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“Uno no sabe la vida que él tenía en la calle, pues de puertas para afuera es otro mundo (…) mi hijo llevaba 12 años consumiendo drogas, por lo que nunca quiso sacar la cédula, solo teníamos el registro civil y unas fotos para comprobar que era nuestro ser querido. Es lamentable que hubiera escogido esa mala vida”, dijo.
A los minutos una hermana de ‘Iguano’ arribó al sitio para protagonizar junto a su madre una escena de llanto y dolor, mientras los miembros de la Brinho inspeccionaban el sitio en la búsqueda de elementos que permitan la identificación de los responsables.
“Nosotros no vimos nada, pero escuchamos unos disparos y el sonido del motor de una moto. Cuando salimos a ver qué había sucedido observamos que el muchacho, que vestía de buzo y pantaloneta negra y zapatos grises con blanco con líneas blancas y rosadas, estaba tirado en el piso. De inmediato llamamos a las autoridades (…)”, aseguró un testigo.
Una fuente judicial indicó que una de las hipótesis apunta a que dos hombres, que iban en una moto negra, llegaron hasta donde estaba ‘Iguano’ y uno de ellos le disparó, luego huyeron a toda velocidad.
El cuerpo fue trasladado por la Brinho hasta Medicina Legal, mientras los investigadores que asumieron el caso recopilan testimonios y demás elementos que permitan la captura de los asesinos.
Al parecer, en los videos de una cámara de seguridad de la Policía de Cúcuta, ubicada en una cancha de fútbol cercana, no quedó registrado el crimen.
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